UNAM transforma aulas con cultura de paz

CULTURA DE PAZ

En un contexto global marcado por el aumento de conflictos y discursos de odio, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) ha convertido sus aulas de bachillerato en espacios para sembrar la cultura de paz.

Como parte de una estrategia institucional, más de 35 mil 600 estudiantes de nuevo ingreso participan en talleres diseñados para enseñarles a resolver conflictos mediante el diálogo, la empatía y la mediación.

• La iniciativa forma parte del programa Cultura de Paz: un Semillero Universitario, impulsado por la Rectoría y el Programa Universitario de Cultura de Paz y Erradicación de las Violencias. Los talleres se imparten en los planteles del Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH) y la Escuela Nacional Preparatoria, con la participación de más de 400 docentes capacitados.

Durante las sesiones, los jóvenes aprenden a identificar emociones, reconocer el conflicto como parte de la vida social y explorar formas pacíficas de resolución. En aulas como la sala Albert Einstein del CCH Vallejo, los estudiantes reflexionan sobre el respeto, la inclusión y la justicia como pilares de una convivencia sana.

Una respuesta educativa ante la violencia normalizada

El rector Leonardo Lomelí Vanegas subrayó que esta estrategia busca contrarrestar las "violencias normalizadas, exclusiones persistentes e incertidumbre" que afectan a las juventudes mexicanas.

"La cultura de paz no debe asumirse como un ideal abstracto, sino como una práctica diaria y una política educativa para lograr un presente más justo y un futuro más digno", afirmó durante la inauguración de la Primera Semana de Cultura de la Paz.

Además de los talleres, el programa contempla la incorporación de asignaturas específicas sobre resolución pacífica de conflictos, actividades culturales y deportivas, formación docente, investigación y la creación de redes de constructores universitarios desde la propia comunidad.

Según el Global Peace Index Briefing 2025, el número de conflictos activos en el mundo es el más alto desde la Segunda Guerra Mundial, con más de 78 países involucrados. En este escenario, la apuesta de la UNAM por la cultura de paz se posiciona como una respuesta educativa de largo alcance.