Exgeneral Venezolano confiesa delitos federales y colabora con autoridades de EU

COOPERACIÓN

• El exgeneral venezolano Hugo Armando Carvajal, conocido como El Pollo, se declaró culpable el pasado 25 de junio ante el juez Alvin K. Hellerstein en la Corte del Distrito Sur de Nueva York. La confesión incluye cuatro delitos federales, entre ellos narcotráfico, narcoterrorismo y posesión ilegal de armas de fuego, cometidos durante su gestión como jefe de inteligencia militar bajo el régimen de Hugo Chávez.

La declaración se produjo apenas días antes del inicio formal de su juicio, en un intento por cooperar con las autoridades estadounidenses y obtener una reducción sustancial de su condena, que podría evitarle la cadena perpetua.

La audiencia de sentencia está programada para el 29 de octubre de 2025, momento en el que Carvajal podrá ofrecer información adicional a cambio de clemencia judicial.

Durante su colaboración con fiscales federales, Carvajal comenzó a revelar cómo el aparato chavista financió campañas de políticos de izquierda en América Latina, incluyendo a varios que posteriormente llegaron a la presidencia.

Según documentos obtenidos por The Objective y citados por Semana, el exespía confesó que el régimen venezolano entregó dinero a al menos nueve movimientos políticos en la región.

Entre los nombres mencionados se encuentran figuras de Colombia, Bolivia, Nicaragua y otros países, aunque las investigaciones aún no han confirmado el alcance legal de estas acusaciones. Medios como El País y Excélsior señalan que Carvajal estaría dispuesto a entregar documentación y testimonios que vinculan al chavismo con estructuras de financiamiento político transnacional.

La confesión de Carvajal no solo tiene implicaciones penales en EE.UU., sino que podría desencadenar investigaciones internacionales sobre el uso de fondos públicos venezolanos para influir en procesos electorales extranjeros. Su testimonio podría convertirse en pieza clave para fiscales en América Latina que investigan corrupción, lavado de dinero y vínculos con el crimen organizado.

Además, su cooperación podría redefinir el papel del chavismo en la geopolítica regional, al exponer mecanismos de intervención política encubierta que operaron durante más de una década.