ONU declara oficialmente hambruna en Gaza

HAMBRUNA EN GAZA

La ONU declaró oficialmente la existencia de hambruna en Gaza este viernes, tras alertas constantes sobre la situación crítica en el enclave palestino. Según expertos del organismo, alrededor de 500 mil personas enfrentan condiciones "catastróficas" de inseguridad alimentaria, justo cuando Israel amenaza con intensificar sus operaciones militares en Ciudad de Gaza.

La Clasificación Integrada de la Seguridad Alimentaria (IPC), entidad independiente con sede en Roma, confirmó que actualmente la gobernación de Gaza está en situación de hambruna, y advirtió que esta podría extenderse hacia las regiones de Deir al Balah y Jan Yunis antes de que finalice septiembre.

Esta declaración generó una reacción inmediata del gobierno israelí, que negó la existencia de una hambruna. El Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel calificó el informe como inexacto:

"No hay hambruna en Gaza", sostuvo.

En conjunto, Gaza, Jan Yunis y Deir al Balah representan cerca del 65.5 % del territorio y de la población del enclave palestino. De acuerdo con la ONU, más de medio millón de personas se encuentran en el nivel más grave de la escala de inseguridad alimentaria de la IPC: una etapa marcada por el hambre extrema y riesgo de muerte.

El director de la Oficina de Asuntos Humanitarios de la ONU, Tom Fletcher, responsabilizó a Israel por la gravedad de la crisis, acusándolo de haber bloqueado sistemáticamente la ayuda humanitaria:

"Esta hambruna pudo haberse evitado. Nos va a perseguir a todos", lamentó desde Ginebra.

En respuesta, el organismo israelí COGAT, encargado de coordinar asuntos civiles en los territorios ocupados, desestimó el informe de la IPC, calificándolo como "tendencioso y falso", alegando que no refleja los esfuerzos realizados para mejorar la situación humanitaria.

Las puertas del infierno

El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk, calificó como crimen de guerra el uso del hambre como táctica militar. Mientras tanto, el secretario general de la ONU, António Guterres, hizo un llamado urgente a un alto el fuego inmediato, la liberación de rehenes y acceso humanitario total y sin restricciones.

Por su parte, el ministro de Defensa israelí, Israel Katz, advirtió que Ciudad de Gaza será destruida si Hamas no accede a deponer las armas, liberar a los rehenes y aceptar los términos de paz propuestos por Israel.

"Pronto se abrirán las puertas del infierno sobre los asesinos y violadores de Hamas", escribió Katz en X.

Añadió que, si no cumplen las condiciones, Gaza sufrirá el mismo destino que Rafah y Beit Hanun, dos ciudades devastadas desde el inicio del conflicto.

Estas declaraciones se dieron justo después de que el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, autorizara nuevas negociaciones para liberar a los rehenes aún cautivos.

En contraste, el embajador de EE.UU. en Israel, Mike Huckabee, restó importancia a la situación alimentaria en Gaza al declarar:

"¿Saben quiénes se mueren de hambre? Los rehenes secuestrados y torturados por los bárbaros de Hamas", incluso antes de que se difundiera el informe del IPC.

En el terreno, periodistas de AFP han sido testigos del caos en las entregas de ayuda, donde cientos de personas, en desesperación, suplican por un poco de alimento.

Aunque Israel afirma estar dispuesto a negociar un cese al fuego, mantiene el control de alrededor del 75 % del territorio de Gaza y esta semana movilizó a 60 mil reservistas, en preparación para una posible ofensiva final sobre Ciudad de Gaza.

Por otro lado, Hamas aceptó una propuesta de tregua que contempla 60 días de alto al fuego y la liberación gradual de los rehenes, a cambio de la excarcelación de cientos de presos palestinos. No obstante, Israel insiste en que todos los cautivos deben ser liberados simultáneamente.

El conflicto se originó el 7 de octubre de 2023, cuando un ataque de Hamas en territorio israelí dejó 1,219 muertos, en su mayoría civiles, según cifras oficiales recogidas por AFP.

Las represalias israelíes, hasta ahora, han causado la muerte de 62,192 personas en Gaza, también en su mayoría civiles, de acuerdo con el Ministerio de Salud gazatí, cuyos datos son considerados confiables por la ONU.