Se festeja el noveno mes del calendario islámico: Comienzo del Ramadán

Es el Inicio del Ramadán, considerado el noveno mes dentro del calendario islámico.

Con ello se conmemora la primera revelación del profeta Mahoma, en la cual en el año 610 d.C. el arcángel Gabriel se le apareció al profeta Mahoma y le reveló el Corán, considerado la obra sagrado del Islam. Es por esto que los musulmanes ayunan a lo largo de este mes para conmemorar esta revelación del Corán, llamada Laylat Al Qadaro Noche del Destino.

El término Ramadán procede de la raíz Ramada, que en árabe significa chicharrar y ardiente. Constituye una época de ayuno, frase y meditación en el que los pecados son perdonados, cuya duración es de veintinueve a treinta días. Empieza con la aparición de la luna creciente a lo largo de el último día del mes de Shaabán (octavo mes del calendario lunar islámico).

Para el año 2021 el lapso de Ramadán está previsto a partir del 13 de abril al 12 de mayo.

A lo largo de el Ramadán se debería ejercer diariamente el ayuno, que se inicia al amanecer y termina al ocaso de todos los días. Todos los musulmanes en edad adulta (hombres y mujeres) tienen que ayunar de forma forzosa, a distinción de los próximos casos:

- Enfermos crónicos.
- Enfermos mentales.
- Menores de edad.
- Féminas embarazadas, en lapso de lactación o que tengan la menstruación.
- Diabéticos.
- Personas que se encuentren viajando.

Por igual se contemplan varias excepciones en las cuales se posibilita desayunar a lo largo de el Ramadán, con la probabilidad de recobrar los días que no se logró el ayuno:

- Personas que ejercen trabajos pesados.
- Enfermos que logren agravar su estado de salud con el ayuno.
- Personas con apetito o sed severa, que logre afectar de manera negativa en su estado de salud.
- Personas que permanecen de viaje tienen la posibilidad de desayunar, una vez que viajan la misma distancia por la que se le posibilita acortar las oraciones (un día y una noche) y rezarlas juntas.

Únicamente es comestible y tomar agua o líquidos previamente del alba (Suhur) y desde el atardecer o el ocaso del día. Al concluir el ayuno se empieza con una ingesta moderada de agua, fruta o dátiles, celebrando con el núcleo familiar y amistades por medio de un festín nocturno o Iftar.

A lo largo de el Ramadán se reciben recompensas espirituales por los ayunos hechos, llamados SawāboThawāb.

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