Stiglitz aplaude a Sheinbaum por su trabajo contra los aranceles

SHEINBAUM FIRME ANTE TRUMP

• El economista y premio Nobel Joseph Stiglitz reconoció el liderazgo de la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, frente a las tensiones comerciales con Estados Unidos. En particular, valoró su respuesta ante las amenazas arancelarias del presidente Donald Trump, destacando su enfoque de “cabeza fría”, humildad y firmeza.

“Ha manejado las cosas muy bien”, afirmó Stiglitz tras un encuentro con periodistas latinoamericanos en el Festival Gabo 2025, donde presentó su nuevo libro Camino de libertad: La economía y la buena sociedad.

Durante la conversación, subrayó que México ha actuado con inteligencia ante los desafíos del actual escenario geopolítico, aunque advirtió que el país debe diversificar su economía, ya que su dependencia de Estados Unidos representa un riesgo.

“El largo plazo exige que México deje de depender tanto de EE.UU. Es peligroso, como lo es para Canadá y Colombia”, explicó, proponiendo a Europa y China como alternativas comerciales.

Stiglitz también criticó duramente a Trump, señalando que ningún país puede confiar en él ni en los acuerdos que firma, pues carece de respeto por el derecho internacional y las reglas del comercio global.

“Firmar un tratado con Trump es firmar una tregua temporal. Lo romperá al primer impulso”, sentenció.

De cara a la revisión del T-MEC en 2026, el Nobel alertó sobre el contexto adverso: presiones de Washington para frenar los flujos migratorios, mayor acción contra el crimen organizado, y amenazas arancelarias en caso de desacuerdo. Recordó que Trump suele intimidar a países individualmente, pero se retrae cuando encuentra resistencia colectiva.

“Estados Unidos actúa como si controlara la economía mundial, pero solo representa el 25% del PIB global. Los demás países deben unirse para enfrentarlo”, afirmó Stiglitz, provocando aplausos del público.

En su intervención, también cuestionó la visión neoliberal de libertad, que según él favorece a unos pocos y debilita el bien común. Criticó la concentración de poder en manos de “oligarcas” tecnológicos y denunció que su modelo se basa en fomentar la polarización social.

• Para contrarrestar este fenómeno, propuso reforzar el periodismo de investigación e invertir en medios públicos y privados responsables. Además, defendió la necesidad de un “capitalismo progresista” basado en la justicia fiscal, con impuestos a la riqueza, ingresos y propiedades. Puso como ejemplo a Warren Buffett, quien ha reconocido pagar menos impuestos que su secretaria gracias a las deducciones fiscales.

Finalmente, cuestionó el concepto de libertad individual que permite portar armas de asalto o rechazar medidas sanitarias como las mascarillas o las vacunas, a costa del bienestar colectivo.