Vaticano entrega piezas indígenas a Canadá en gesto de reconciliación

GESTO HISTÓRICO DE RECONCILIACIÓN

Este sábado, el Vaticano concretó la entrega de 62 piezas pertenecientes a pueblos originarios de Canadá, reconociendo por primera vez su implicación en la represión y asimilación forzada de culturas indígenas en América.

Entre los objetos devueltos se encuentran un emblemático kayak inuit, cinturones de wampum, garrotes de guerra y máscaras ceremoniales. El papa León XIV los entregó a representantes de la Conferencia Canadiense de Obispos Católicos, quienes facilitarán su regreso a las comunidades indígenas correspondientes.

Según un comunicado conjunto, esta restitución representa un "gesto tangible de diálogo, respeto y fraternidad", y constituye un avance clave en el proceso de reconciliación entre la Iglesia católica y los pueblos originarios.

Regreso tras un siglo en el Vaticano

Las piezas formaban parte de la colección etnográfica Anima Mundi, creada con objetos enviados a Roma para la Exposición Misionera de 1925. Aunque el Vaticano sostiene que fueron obsequios al papa Pío XI, historiadores y líderes indígenas cuestionan si estas entregas fueron realmente voluntarias, dadas las condiciones de desigualdad que prevalecían en las misiones religiosas.

Durante ese periodo, órdenes católicas colaboraron con políticas gubernamentales de asimilación forzada, incluyendo la confiscación de objetos ceremoniales como los usados en el potlatch, prohibido en 1885. La Comisión de la Verdad y Reconciliación ha calificado estas prácticas como "genocidio cultural".

Un proceso acelerado tras el encuentro con Francisco

• Las negociaciones para la devolución se intensificaron tras la visita en 2022 de líderes indígenas canadienses al papa Francisco, quien ofreció una disculpa formal por el papel de la Iglesia en las escuelas residenciales, donde miles de niños indígenas sufrieron abusos y desarraigo cultural. Durante ese encuentro, se solicitó la restitución de varios objetos, incluido el kayak inuit, y Francisco respaldó públicamente la iniciativa.

La entrega coincide con el Año Santo y se realiza justo un siglo después de la primera exhibición de las piezas en 1925.

Reconocimiento de abusos coloniales

La embajadora de Canadá ante la Santa Sede, Joyce Napier, calificó la devolución como un paso crucial hacia la reconciliación, destacando que las comunidades indígenas llevaban décadas solicitando el retorno de estos bienes culturales.

En 2023, el Vaticano también repudió la Doctrina del Descubrimiento, una serie de bulas papales del siglo XV que legitimaron la colonización de territorios indígenas por potencias europeas. Aunque no han sido formalmente revocadas, el rechazo fue considerado un avance significativo.

Destino final de los artefactos

Las piezas serán trasladadas al Museo Canadiense de Historia en Gatineau, Quebec, donde especialistas y representantes indígenas trabajarán para identificar su procedencia exacta y decidir su destino final. La Iglesia canadiense se comprometió a asegurar su conservación y a garantizar que las comunidades indígenas sean las legítimas custodias de estos objetos.