A dos años

Es lógico y hasta entendible que los creyentes a ultranza digan que, a dos años del histórico triunfo electoral, la 4T ha dado excelentes resultados. La defensa de una gestión en tránsito es “normal” y hasta muchas veces, obligada, una delgada línea que los adeptos deben cuidar para no caer en el fanatismo, el autoengaño, la ceguera, el peligroso atrincheramiento; en tanto también es de esperarse y muy necesario que exista la disidencia, aquellos que contrasten con debates, datos y sucesos lo que el poder enuncia, no hay pues mejor manera de mantener al gobernante con los pies en la tierra, que con el escrutinio constante, con la critica constructiva y con el empuje de la competencia democrática, eso sí, el opositor debe recoger sus demandas de la base social, darle voz efectiva y fidedigna a todos aquellos ciudadanos que por la razón que sea no han recibido el plano mínimo de impacto positivo de la acción del Estado. También en este segmento debe existir honestidad, y renunciar al esmero transicional de recuperar o acceder al poder al costo y de la forma que sea. Lamentablemente hoy, ambos bandos están enfrentados a “muerte” y el gran perdedor puede ser México.

Las mediciones tienen muchas características, pero hay dos que son pertinentes para explicar el acontecer del gobierno de AMLO.

Una es que se pueden adaptarse a una clasificación acordada para describir de mejor manera un dato, y la otra que debemos resaltar es la precisión, que indudablemente siempre tendrá su definición y comprobación en la realidad.

El mandatario nacional presume que con sus datos, la dispersión de ayuda social es la mas grande y efectiva de la historia, se acepta pues que es una acción noble por cualquier lado de donde se le vea por ello se celebra que los programas del bienestar galopen fuerte a lo largo y ancho del territorio nacional, (pero es menester apuntar que urgen controles, metas, plazos, mecanismos de monitoreo fiables, auditoria permanente, de lo contrario la política pública se reducirá a dinero malgastado), reiteró que se ha logrado contener abismalmente el saqueo a las venas tubulares que mueven el combustible a lo largo y ancho del país, buscando la autosuficiencia de combustibles, se celebra la rehabilitación de 6 refinerías y la construcción en marcha de una nueva,  exalta la lucha férrea contra la corrupción y la disminución de delitos, se presume la austeridad burocrática -sobre todo la de alto nivel- y la sencillez de la oficina presidencial, las 100 universidades públicas, el avance y viraje absoluto en la búsqueda de la verdad sobre los 43 de Ayotzinapa, los caminos rurales con mano de obra comunitaria, el buen ánimo y la efectiva dispersión de créditos por la crisis acentuada por la COVID-19, el Tren Maya, los fertilizantes y el buen paso en la llegada de remesas. Números y datos que, en la visión del mandatario, son el ejemplo de que la 4T ha ido cumpliendo a cabalidad la plataforma político-electoral que le presentó a los ciudadanos para que le dieran el triunfo en las urnas.

En las formas de ayer se reitera que se ha acabado la parafernalia grosera del día del presidente, amén de que un desafortunado intercambio en twitter robo a AMLO la exclusividad que enmarcaba el festejo.

En el segmento de la precisión, indudablemente es donde la oposición encuentra tierra fértil para torpedear el andar de la 4T, y es que las voces críticas martillan sobre el pendiente en materia económica, lo que a veces da luces de incontrolable emergencia sanitaria, la estrategia contra la inseguridad extendida, el desempleo y la caída de inversiones y la confianza, pintan pues un escenario caótico y han tomado como anuncio, al unisonó lo que antaño AMLO proclamaba desde los templetes: “ que vamos a una debacle y que es urgente detenerla”.

Caminando bien sobre la ruta trazada, es la visión y proclama del oficialismo; caos, retroceso, autoritarismo y ocurrencias es el pregón de los opositores, México y su gente en medio de esta lucha política, ya veremos quien termina teniendo la razón…

Zarpazo. El ensordecedor silencio de la joven funcionaria, es lo que ha permitido que el asunto escale alto en el debate y la exigencia.