AMLO revivirá la Comisión del Grijalva; necesaria una política integral de aguas

*La gestión estratégica de la cuenca se mantuvo de 1951 a 1985 *Ordenará el Presidente que las presas se mantengan casi vacías

CONFIRMÓ el presidente Andrés Manuel López Obrador la expedición de un decreto para regular por Ley la operación de las cuatro presas del Alto Grijalva, así como el restablecimiento de la Comisión del Río Grijalva que funcionó de 1951 hasta 1985 cuando el gobierno de Miguel de la Madrid decidió desaparecerla. Durante los gobiernos posrevolucionarios fueron creadas en el país varias comisiones para atender las cuencas más importantes como la de Tepalcatepec y la del Balsas de las que fue vocal ejecutivo nada menos que el general y ex presidente Lázaro Cárdenas (1947-1958 y 1962-1970) respectivamente.

Tal era la importancia que aquella época se otorgó a los cuerpos de agua en el país que, me comenta el investigador Firdaus Jhabvala, “había un concepto nacional, una visión estratégica del manejo de ese recurso”. En efecto, las comisiones de las cuencas estuvieron adscritas primero a la Secretaría de Recursos Hidráulicos y posteriormente a las Secretaría de Agricultura y Recursos Hidráulicos.

Refiere Jhabvala que un antecedente importante en las comisiones hidrológicas en México fue la denominada Autoridad del Valle de Tennessee en Estados Unidos, durante el gobierno de Franklin D. Roosevelt en 1933. De hecho, en la campaña presidencial de Cárdenas el tema hidrológico ocupó una parte importante de su concepción para el desarrollo del país. Otra palanca, como ya sabemos, fue el petróleo.

EL DECRETO Y EL SECRETO

DE ACUERDO al anuncio de López Obrador en la operación de las presas del Alto Grijalva se dará prioridad a la seguridad de la población, por sobre la generación de energía eléctrica. Aunque este mandato ya existe entre las responsabilidades de la Comisión Nacional del Agua, surgida de la desaparición de la SARH, no se cumple.

Dijo AMLO: “Voy a firmar esta semana un decreto de protección a la población civil en todo lo relacionado con el manejo de las cuatro hidroeléctricas, de las cuatro presas del río Grijalva para que los vasos de esas presas se mantengan vacíos en temporadas de lluvia: agosto, septiembre y octubre básicamente y otras acciones”.

Son precisamente esas “otras acciones” las que determinarán la eficacia de la limitación en el manejo de las presas. Como se ha mostrado en estos días, si bien el desfogue de los embalses en un factor que agrava las inundaciones –en 2007 fue el factor principal-, Tabasco padece la vulnerabilidad de su territorio y de la distribución de su población.

Este año, de manera extraordinaria, Tabasco ha sido impactado en tres frentes con tres oleadas sucesivas de inundaciones. No sólo por lo que llueve en la entidad, sino por las precipitaciones en Chiapas y en Guatemala.

En estos días, como usted sabe, la emergencia se incrementó en la zona de influencia del río Usumacinta. Especialmente en poblaciones de Tenosique, Balancán, Zapata y Jonuta.

Aunque en número de afectado las cifras no serán notorias porque en la zona hay pequeñas poblaciones y dispersas, el daño en el sistema de vida tendrá un impacto para todo el estado siendo allí una región agrícola y ganadera por excelencia.

Como se ha visto, el actual gobierno federal busca recuperar las mejores prácticas de las administraciones que dieron prioridad a una política de integración nacional. Si es así, en este modelo no puede estar ausente la gestión integral del agua y del territorio. Ese es el secreto.

LA POLÍTICA INTERNA E INTENSA

PARA José Antonio de la Vega, nuevo secretario de Gobierno, quien asumió el cargo el primero de noviembre, Tabasco padece una gran conflictividad social vinculada sobre todo a la época en la que Pemex llegó a Tabasco. Dijo en una entrevista con Tele-reportaje: “Si bien Pemex ha traído recursos y apoyó mucho en la modernización del Estado también nos dejó ese tipo de problemas sociales (bloqueos y reclamos) y que tenemos que ir buscando la manera de ir atendiendo y que también es un tema del Presidente de la República y del Gobernador del Estado.”

El responsable de la política interior en Tabasco se refirió al necesario diálogo con los líderes de los partidos políticos en la entidad, así como la interlocución con representantes de la sociedad, sindicatos, empresarios, organizaciones diversas. Pero sin duda que el mayor desafío será coordinar el trabajo de las varias dependencias estatales para atender los asuntos de fondo como el rezago social que atiza el encono, las afectaciones a una población y un entorno vulnerables, la aplicación de las leyes sin menoscabo de la justicia. En fin.

Históricamente la Secretaría de Gobierno (Gobernación, a nivel federal), fue hasta antes del arribo de la denominada tecnocracia a finales de los setentas (luego el “modelo neoliberal”), la antesala del Poder Ejecutivo. Esto sigue siendo en muchos estados, aunque a nivel federal las decisiones se concentraron en la Secretaría de Hacienda y antes en Programación y Presupuesto.  

En Tabasco, esa dependencia tendrá seguramente un papel protagónico con la llegada de De la Vega Asmitia en sustitución de Marcos Rosendo Medina, no sólo por las características del nuevo titular, sino porque se inicia un periodo en el que lo político electoral se coloca en el centro de las decisiones públicas.

AL MARGEN

AUNQUE PRI, PAN y PRD se proponían alianzas totales en el país, sigue siendo difícil mezclar agua y aceite, porque también cada partido tiene sus características e intereses locales. Del PVEM no hay sorpresas: acostumbra ir solo en las intermedias y juntar sus canicas para “colgarse” en las presidenciales. (vmsamano@hotmail.com)