Día del Árbol, la batalla contra la deforestación y por la vida

En el año 2011 un grupo de ecologistas se enfrentó al gobierno del estado, en ese momento se trataba de Andrés Granier Melo. Querían impedir que se talarán árboles en el camellón de Ciudad Industrial.

El acto se llevó en la madrugada del mes de abril con motosierras por parte del personal de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, donde incluso participó la delegada de esa localidad dando el consentimiento.

Ahí murió una parte importante del pulmón de Centro. Se habla de mil árboles; sin pena ni gloria, todo se vino abajo, dejando como bandera banquetas de cemento y una ampliación de carretera. Otra acción similar le fue impedida al entonces alcalde Gerardo Gaudiano, quien tuvo que dar marcha atrás en sus planes por talar los árboles de Paseo Tabasco, en Villahermosa.

La protección al medio ambiente es una lucha constante que se tiene en el mundo. Diversos grupos de ecologistas gritan fuerte, pero parece que no se les escucha. La tala de árboles, tan solo en México en el 2018, de acuerdo a la Profepa, sobrepasó el 30 por ciento de lo autorizado.

El Programa Nacional Forestal 2013-2018 ubicó entre los estados más afectados a Michoacán, Oaxaca, Chiapas, Estado de México, Hidalgo, Veracruz, Guerrero, Tlaxcala, Puebla, Morelos, Colima y Durango.

Por la importancia que este pulmón natural tiene, en México, desde 1959, celebran el Día del Árbol, cada segundo jueves de julio. Esta efeméride se celebra por decreto del entonces presidente Adolfo López Mateos.

El objetivo de este día es dedicar un cuidado especial, conservación y reflexión sobre los árboles como parte fundamental para la preservación de la vida.

México se encuentra entre los 10 países con mayor superficie forestal y reforestada a nivel mundial. Sin embargo, en los últimos años, la deforestación ha ido aumentando debido a catástrofes naturales y provocadas por los seres humanos como los mismos incendios.

La plataforma Global Forest Watch advierte que México perdió 274 mil 183 hectáreas de bosques en 2016, principalmente por el avance ganadero y agrícola, principalmente en Chiapas, Campeche, Quintana Roo, Oaxaca, Yucatán y Veracruz.

La entidad no aparece en esas estadísticas, antes ya había pasado por un bárbaro proceso de ganaderización. La amenaza no ha terminado, y poco a poco va perdiendo su selva tropical. De acuerdo a la Comisión Estatal Forestal (Comesfor), los planes en la Chontalpa y Balancán-Tenosique buscaron favorecer la agroindustria, y con ello se talaron cientos de árboles maderables que se distribuyeron en el territorio, el problema es que ya no reforestaron.

Andrés Manuel López Obrador puso en marcha el programa Sembrando Vida, y en una primera etapa se sembrarían más de 500 mil hectáreas de caoba, cedro, cacao, café, hule, pimienta, milpa y árboles frutales, donde el campesino recibirá 4 mil 500 pesos mensuales y 500 pesos más se irán a un fondo de ahorro para el productor, aunque la meta a mediano plazo es sembrar un millón de hectáreas y generar 400 mil empleos.

Quizás ahora sea una buena forma de celebrar el Día del Árbol. A cuidarlo, a plantar más. Y ojalá quede atrás esa obsesión de construir plazas y unidades habitacionales sin un solo árbol.

PARÉNTESIS

Un promedio de 15 empresas tabasqueñas ya fueron contratadas por transnacionales petroleras que se están instalando en el estado, así lo confirmó el presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX) Tabasco, Ricardo Edmundo Castellanos. Esperemos que junto a la inversión venga también el cuidado del entorno. (kundera_w@hotmail.com)