El plan energético

Más allá del impacto inmediato que la inyección de dinero (75 mil millones en 2019) que tendrá PEMEX, todos debe tener presente que de ser exitoso este proyecto y “convicción personal” que el Presidente de la República está alentando, exponenciaria como efecto domino una recuperación económica; si bien es cierto, existen posturas de especialistas que dan cuenta que el plan de refinación que el nuevo gobierno quiere detonar es riesgoso, costoso y hasta sin sentido; también hay quienes de manera más simple atacan la idea con su argumento del auge de los vehículos que no necesitaran combustibles fósiles para su funcionamiento, a todos esos incrédulos AMLO les responde también de manera simple y sencilla al espetar que “… (es) un absurdo el vender crudo y comprar gasolinas. Es como vender naranjas y comprar jugo de naranja”.

Lo cierto que en este debate todas la opiniones deben ser atendidas y tomar las previsiones y decisiones necesarias para que el Plan Energético de esta administración federal sea rentable para el país.

El Presidente ayer, desde Dos Bocas, demostró que todo el torrente de información y cercanía que por años ha tenido con - de la industria petrolera es un plus para sus intenciones de dinamitar la transformación, que nadie olvide que en sus años de lucha, exigió en la primer línea de combate que PEMEX trabajará, produjera y pagara lo justo a las zonas donde por su natural actividad, “dañara” el patrimonio de la gente, también siempre denuncio la gran corrupción que al amparo del hidrocarburo, que se ha visto sirvió para “ir secando la gallina de los huevos de oro” y tenga en condiciones de crisis a la gran empresa petrolera de la nación, es pues un experto social que hoy tiene poder para hacer que sus palabras se acaten y se dé pasos hacia la limpia a fondo de un patrimonio nacional que puede poner a México en el bloque del primer mundo.

Indignante es, más allá de filias y fobias, lo que asegura el presidente, en el sentido de que estemos comprando el 75% de las gasolinas que consumimos, por ello, no se debe dudar que donde se pare y hable, López Obrador va a fustigar a los hacedores, promotores y adoradores de la Reforma Energética, no con afanes revanchistas, ni inquisidores, pero si como una forma de mostrar empatía y conexión con la gente, que a diario la sufre por el impacto que el costo de las gasolinas representa  en toda la cadena de consumibles.

Lejos de haber sido un evento más, cargado de “protocolismos” muy socorridos (eso de poner la primera piedra), desde Paraíso, Tabasco el mandatario conmino a apoyar con todo y por todos los esfuerzos de la nueva realidad político – gubernamental, incitó al empresariado a trabajar “limpiamente” y dejo ver que va por la extinción del burocratismo y sindicalismo que ha encarecido los procesos. AMLO tiene fija y clara la meta…

Rosetas. En Jalisco se dice que la elección que lo llevo al cargo de gobernador, representó la última de su carrera política, Pero el Gobernador Alfaro construye una propia agenda estatal que todo pareciera tiene una visión nacional (¿con miras a la sucesión del 24?) ya que diferencia la Transformación de AMLO, con su propuesta – slogan de la Refundación. Ya veremos a quien le va mejor…