El reto de la reactivación económica; qué hacer con quienes viven al día

“QUÉDATE en casa”, sigue siendo la consigna. Aunque hay un segmento que no quiere hacerlo, hay otro segmento que no puede hacerlo. En el caso de las actividades esenciales también habría que ponderar las actividades vitales, por llamar de alguna manera a la labor que realizan quienes viven al día, en la economía informal. Un 56 por ciento de la población ocupada, algo así como 31  millones de personas.

Ahora que se ha permitido, de manera paulatina y controlada, la reapertura de las actividades esenciales, se requiere un enfoque para la informalidad, que muestra sus dos facetas: la vulnerabilidad de quienes así sobreviven, y la importancia como válvula de presión a la economía (o falta de economía). Para estos trabajadores debería existir un enfoque especial con planes y programas que permita su protección y la protección de quienes están en su entorno.

En los días de la Jornada Nacional de Sana Distancia, que oficialmente concluyó el 31 de mayo pero que en los hechos sigue como sana distancia estatal, en Tabasco pudimos observar que siguieron laborando a riesgo propio y de los demás los vendedores ambulantes de verduras, pan, tortillas y alimentos varios; estos que van de casa en casa y de calle en calle.

VIVIR COMO SE PUEDA

ALGUNOS lectores comentaban, y comparto su inquietud, sobre la necesidad de establecer módulos o brigadas de apoyo y orientación: que les entregaran cubrebocas, jabones o gel antibacterial, y hasta folletos de acciones preventivas. Es necesario usar la imaginación y el conocimiento para construir, sobre todo con los marginados hasta ahora, la nueva normalidad.

Durante un acto en Sonora, a finales de marzo, el presidente López Obrador dijo: “Como se nos va a venir muy fuerte la crisis económica, vamos a otorgar un millón de créditos más, de 25 mil pesos, a un millón de pequeñas empresas. Es una inversión adicional de 25 mil millones de pesos: 500 mil (créditos) para empresas de la economía formal y 500 mil para economía informal, porque a diferencia de otros países nosotros tenemos mucha gente que se busca la vida como puede; vive de lo que obtiene con su trabajo diario”.

Aparte de los programas federales, en los estados deberán hacer su propio esfuerzo para aminorar el impacto económico y social de la emergencia sanitaria.

En Tabasco, el gobernador Adán Augusto López anunció el programa Impulsa Tabasco, para apoyar –dijo- la reactivación económica del Estado y apoyar a las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (MiPyMEs) con créditos de fácil acceso y condiciones flexibles. Un programa en coordinación con Nacional Financiera (Nafin), y la banca comercial.

El proyecto es ofrecer créditos directos  desde 150 mil hasta cinco millones de pesos, con un fondo total inicial de 320 millones y que tiene como objetivo respaldar a dos mil 500 negocios. De acuerdo a lo explicado oficialmente el programa de reactivación de las economías regionales y conservación de empleos se está aplicando en 28 estados del país, con el respaldo de los gobiernos estatales.

Recordemos: Tabasco es uno de los estados con mayor porcentaje de informalidad.

LA CURVA ASCENDENTE

AYER Tabasco prácticamente triplicó el número de casos de COVID en un día comparados con los que había registrado cuando el subsecretario Hugo López Gatell, la segunda semana de mayo, consideró que Villahermosa había llegado a su “pico máximo” de contagios y estaba lista para entrar en la fase de declive. En sólo 24 horas se sumaron 286 nuevos casos y 29 fallecimientos; el total de infectados confirmados oficialmente probablemente la entidad rebase los 5 mil el viernes próximo.

De acuerdo a los registros de la Secretaría de Salud estatal, en Tabasco hay 4 mil 609 casos, con un total de 2 mil 878 de pacientes recuperados. Esto último es un buen indicador, pero no hay que descuidar las medidas sanitarias de resguardo domiciliario en lo más posible y la sana distancia en aquellas actividades esenciales. La dependencia reiteró que la semaforización permanece en rojo, de alta circulación del virus.

Aunque en el país se están dando los primeros pasos para la reanudación paulatina de las actividades económicas, todavía hay un largo camino para vencer al virus. Por eso las autoridades y los científicos recomiendan no relajar las medidas de autoprotección. Sólo con solidaridad se puede construir la llamada nueva normalidad, en una forma de vida que tendrá cambios importantes.

Es cierto que Tabasco tiene una disponibilidad de camas superior al 60 por ciento, pero no hay que perder de vista la letalidad de este virus. Quienes de alguna manera se han contagiado o tienen sospechas de estarlo, ya pudieron comprobar la incertidumbre a la que deben enfrentarse ellos mismos y sus familiares. No se diga el dolor de quienes pierden a seres queridos.

En Tabasco, el municipio de la cabecera estatal, Centro, continúa con el mayor número de casos positivos (2 mil 467); le siguen Nacajuca (343); Cárdenas (261); Macuspana (255). El resto está por debajo de la cifra de los 200 casos, pero con tendencia a incrementar. Un comportamiento notorio es el de Jonuta, donde a pesar de que se rompió la inmunidad y suma 20 contagios, al menos ayer no reportó aumento; lo que sí ocurrió con Zapata, donde de 28 pasó a 32.

También resulta interesante, y preocupante, observar que Tenosique registra ya 105 mil casos, en tanto que Balancán hasta ahora lleva 45; una diferencia de más del doble de incidencias.

AL MARGEN

EL PRESIDENTE López Obrador defendió sus “proyectos estratégicos” como el Tren Maya, porque aseguró que impulsarán la recuperación de la economía y la integración de una región históricamente marginada del desarrollo. (vmsamano@hotmail.com)