En los municipios, la batalla por los votos; los resultados impactarán en el Congreso

DE ACUERDO al artículo 115 de la Constitución el “municipio libre” es la base de la “división territorial y de su organización política y administrativa”, para los estados de la federación mexicana; idealmente concebidas las entidades con un régimen interior, una “forma de gobierno republicano, representativo, democrático, laico y popular”. Principios que son violados constantemente, pero esto no quiere decir que no existan.

Como usted sabe, México cuenta históricamente con 2 mil 446 municipios en toda la República, a los que se sumaron en 2020 las 16 alcaldías de la Ciudad de México que dejaron de ser delegaciones políticas.  Los municipios son altamente diferenciados, porque los hay de más de un millón y medio de habitantes, como es el caso de Tijuana (BC) e Iztapalapa (Cdmx); en contraste, Santa Magdalena Jicotlán (Oaxaca), tiene menos de cien habitantes.

Tabasco se ubicaría en lo que podemos considerar un término medio: con sólo 17 municipios (Oaxaca tiene 570, Puebla 217 y Veracruz 2012), su población está más o menos distribuida. Aunque Centro se convirtió en una zona de muy alta densidad demográfica.

DIFERENTE AL 2018

EN LAS ELECCIONES de junio próximo se votará la renovación de un mil 926 ayuntamientos, de los cuales los de Tabasco son los menos en términos de alcaldías y también de habitantes en su conjunto; apenas el 2 por ciento de la población nacional.

Es precisamente las campañas municipales lo que le inyecta a las elecciones intermedias un poco más de interés, salvo en aquellos 15 estados donde también se disputan la gubernaturas. Si sólo fueran votaciones para diputados –sean locales o federales-, la participación en las urnas se reduciría todavía más.

Tal es la razón por la que los partidos han buscado presentar candidaturas competitivas, con la intención de disputarle a la coalición en el poder (Morena) el mayor número de plazas posibles y de paso “jalar” la votación hacia los cargos para diputados federales y locales. Recordemos que actualmente Morena tiene la administración de 15 de los 17 municipios del estado; se prevé que, contrariamente al 2018, las votaciones sean todavía más disputadas.

Es cierto que hay casos excepcionales en los que los abanderados a diputados federales o locales pueden contribuir al triunfo de un partido para la alcaldía, pero son los menos. Por lo general las posiciones legislativas se otorgan por cuotas de grupo o corrientes internas. Obviamente el partido que acierte en combinar la fortaleza de su estructura, así como buenos candidatos(as) a legisladores, tendrá más posibilidades.

En el 2018, la coalición de Morena promovió la novedosa fórmula “seis de seis”, esto es que sus simpatizantes (o más bien los simpatizantes de López Obrador) votaran en un mismo sentido por las seis posiciones en competencia.  En el proceso en curso, Morena nuevamente pretende repetir la fórmula, ahora con “tres de tres” (alcaldía, diputación local y diputación federal); o en donde relevarán gobernadores con el “cuatro de cuatro”. Sin embargo, dice la conseja popular que nunca segundas partes fueron buenas.

LOPEZOBRADORISMO, SÍ O NO

EN TABASCO, junto a las 17 alcaldías se votará por  21 diputados locales de mayoría y seis diputados federales. De la suma total de votos, saldrán los cargos plurinominales.

A nivel nacional, serán renovados 30 congresos locales, con un total de un mil 63 diputados estatales.

Este último aspecto tiene una importancia central para el proyecto de continuidad y profundización del régimen lopezobradorista; o para el propósito de la oposición en frenarlo. Como le hemos comentado, las futuras reformas constitucionales, en la segunda mitad del sexenio, requerirán de que quienes están en el poder cuenten con por lo menos la mitad más uno de los Congresos locales.

Sin embargo, me parece que la verdadera batalla por los votos se dará a nivel de los municipios, por lo menos en Tabasco. Históricamente, salvo la pérdida de dos o tres posiciones, es el partido en el poder el que obtiene la mayoría en las alcaldías. Sobre todo en la estratégica alcaldía de la cabecera estatal, Centro. Un grado mayor o menor de incertidumbre es siempre el ingrediente de la democracia; pero hasta el momento no se observan cambios sustanciales…faltan 30 días de campaña.

AL MARGEN

PORFIRIO Muñoz Ledo anunció un “Encuentro por la República”, presumiblemente con Cuauhtémoc Cárdenas e Ifigenia Martínez, con quienes inició la Corriente Democrática que a finales de los años ochenta rompió con el PRI y del que surgió el Frente Democrático Nacional (FDN). Sin embargo, Cárdenas Solórzano desmintió su participación en “ninguna reunión donde se pretenda crear un frente o alguna cosa de ese tipo”.

El michoacano, que ha mantenido una postura crítica, algunas veces muy notoria, frente a Andrés Manuel López Obrador, se ha cuidado de chocar con el fundador de Morena y también fundador del PRD en su primera etapa. Lo que sí señaló Cárdenas Solórzano es que se requiere “empujar y corregir” algunas políticas presidenciales. Tiene opiniones diferentes en materia de crecimiento de la economía, combate a la inseguridad y delincuencia, creación de empleos y manejo de Pemex, entre otros.

Muñoz Ledo ha ido “estirando la cuerda” en su relación con AMLO, especialmente desde que se frustró su llegada a la dirigencia nacional de Morena. En el extremo acusa al Presidente de “violar la Constitución”, un paso que lo lleva a la ruptura no sólo con la corriente moderada sino también con los segmentos radicales del lopezobradorismo. (vmsamano@hotmail.com)