Evo, la economía y el milagro boliviano; construcción de un modelo alternativo

Evo, la economía y el milagro boliviano; construcción de un modelo alternativo

*Un referente obligado ante el caso mexicano, con sus diferencias

*Nacionalizó hidrocarburos, mantiene crecimiento promedio de 5%

*Claves de su estabilidad: ahorros, política social, mercado interno

EL CORAZÓN es la economía del cuerpo social. Para el prestigiado economista Paul Samuelson se podía diseñar una economía desde el corazón, contraria a la frialdad depredadora del neoliberalismo. Esto, sin embargo, debe estar lejos de la improvisación. Me parece que ahora el corazón de la economía mexicana está siendo observado a detalle; no debe llegarse al punto de una necesaria terapia intensiva.

El presidente Andrés Manuel López Obrador tiene en mente un cambio radical en el modelo económico-financiero neoliberal, y atacar con ello todas las consecuencias negativas. En varias ocasiones se ha referido al llamado “desarrollo estabilizador” que vivió nuestro país entre 1940 y 1970, con altas tasas de crecimiento en el Producto Interno Bruto acompañado de un sistema de reparto de la riqueza, con sus fallas pero reparto al fin. Se habló del “milagro mexicano”. Después, cuando detonó la crisis, se dijo que los mexicanos estábamos sobreviviendo de milagro.

Eran otros tiempos. El mundo no era tan interdependiente como ahora. México no era tan dependiente. Todavía recibía los beneficios de una industria petrolera nacionalizada y pujante.

LA REALIDAD ES MÁS RADICAL

EN ESTOS TIEMPOS se habla de otro sorpresivo proceso un poco más al sur de nuestra América. El “milagro boliviano” le llaman a la etapa que inició con la llegada del dirigente indígena Juan Evo Morales Ayma a la presidencia de ese pequeño país de poco más de 11 millones de habitantes en 2006 y que va por su cuarta reelección. El éxito económico de su gestión, que se refleja en el ámbito social, ha colocado prácticamente fuera de  discusión el tema político de la permanencia en el poder.

El equipo económico de Evo Morales está encabezado por Luis Arce Catacora, quien se mantiene al frente de las finanzas desde hace ya más de doce años; de acuerdo a diversos testimonios, una pieza clave en el gobierno boliviano es el ex guerrillero y profesor universitario Álvaro García Linera, actual vicepresidente y quien realizó estudios inconclusos de matemáticas en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Su formación ha sido autodidacta en intensa relación con grupos indígenas, campesinos e intelectuales. Llama la atención que ya anunció que ya no acompañará a Evo Morales en la nueva campaña electoral porque decidió dedicarse a “la batalla de las ideas”, a la formación política, pero sin abandonar la actual revolución pacífica  boliviana.

El “milagro de Evo” es objeto de numerosos estudios críticos y laudatorios. La Comisión Económica para América Latina (Cepal), que encabeza la mexicana Alicia Bárcena y que realizó el Plan Para Centroamérica a petición de López Obrador, considera a Bolivia como el país líder del crecimiento económico regional. Para este año tiene una proyección de 4.3% cuando el promedio del resto es de sólo 1.3%;

Las buenas cuentas en el PIB boliviano han sido una constante en los años recientes. El Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial reportaron que 2009 fue de 3.4%; en 2014, de 5.5; en 2015, de 4.8 y en 2016, de 4,3% anual. Ni siquiera la caída del precio mundial del gas natural lo afectó, como tampoco la crisis mundial que derrumbó las economías del sur americano. A pesar de que se habla de un “proceso radical” encabezado por el gobierno indigenista, Bolivia es considerado como un país con seguridad jurídica y estabilidad.

MÉTODO Y PROYECTO

EN UN DESPACHO de BBC Mundo, son tres las claves del éxito boliviano según su corresponsal Cecilia Barría: la nacionalización de los hidrocarburos y el uso racional de los recursos generados, que también mejoró los ingresos fiscales; el ahorro sin sacrificar las políticas de mejoramiento del salario y el combate a la pobreza; y la estabilidad social en un país que entre 2001 y 2005 Bolivia había tenido cinco presidentes en un contexto de violencia extrema. Evo Morales llegó con un discurso radical que fue moderando sin cambiar sus proyectos.

Le dijo a BBC Mundo un portavoz del FMI, organismo que  no se caracteriza por sus planteamientos progresistas: “En los últimos 14 años, el crecimiento económico (de Bolivia) ha sido impulsado principalmente por el boom de las materias primas, los ingresos por aumento de impuestos, significativas inversiones públicas y alto gasto social”. La redistribución del ingreso fortaleció su mercado interno.

Existen dudas sobre el futuro como también críticas por los desatinos del “modelo boliviano”, pero muy pocos pueden contradecir los resultados: la nación más pobre y desigual de Sudamérica lleva más de una década creciendo a un promedio anual de 5%, al tiempo que entre 2004 y 2015 la pobreza bajó de un 63% de la población a un 39%.

Una economía con el corazón…y la cabeza.

AL MARGEN

HASTA tres mil millones de pesos podrían destinarse al “rescate” de los malecones de Villahermosa, anunció Román Meyer, titular de la SEDATU federal, durante su vista ayer a Tabasco donde firmó con el gobernador Adán Augusto López el convenio para los primeros dos mil millones que se asignarán durante tres años. El objetivo, se dijo, es recuperar la zona, modernizar la infraestructura, sanear el río Grijalva y – en consecuencia – mejorar la vida de los habitantes y la imagen urbana. También fue presentado el ambicioso programa “Mi México Late” para el rescate de ciudades con alto índice de rezago. Esperemos que así sea. (vmsamano@hotmail.com)