Factor petrolero, determinante para Tabasco; urge remontar la contracción de la economía

*Invertirá Pemex en pozos unos 200 mil millones durante 2020

*Oportunidad: se asegura que arrancó un tercer auge petrolero

*Hace más de ochenta años un llamado a “sembrar petróleo”

TABASCO requiere unos 22 mil 200 nuevos empleos formales cada año, por lo menos. Pero ha tenido décadas de estancamiento y retroceso, agudizado por la caída del sector petrolero (menos barriles de petróleo extraídos, descenso del precio del crudo), lo que llevó al cierre de empresas vinculadas directamente a Pemex, con un efecto dominó en obras y servicios. La esperanza de recuperación se cifra en lo que es anunciado como un nuevo auge petrolero.

Hay mucho que remontar. Así lo reconocieron los responsables de diversas áreas de la administración estatal que comparecieron ante los diputados en la Glosa del Primer Informe de gobierno. Sin desestimar los saldos positivos en algunos casos, o los déficits persistentes en otros, existe lo que los especialistas denominan “problema estructural” que debe atenderse: el crecimiento económico.

En la última década, hasta el 2018, Tabasco se ubicó en el listado de más bajo desempeño en cuanto al incremento del PIB (ya no digamos del reparto de la poca riqueza generada): en los últimos seis años, hasta antes del inicio de la actual administración, la entidad reportaba un decrecimiento promedio del 3.1 por ciento anual. En el 2017 el sector petrolero se desplomó en un 14.4 por ciento, según estimaciones extraoficiales. El impacto fue brutal.

Como me lo comentó el destacado economista Firdaus Jhabvala, conocedor del entorno estatal y regional, Tabasco tendría que estar en una especie de emergencia económico-financiera. Un plan contra la catástrofe. Las esperanzas están fincadas en una locomotora que podría remolcar al estado: los hidrocarburos. Con un agregado prometedor: la decisión del presidente López Obrador de darle prioridad al sur sureste en sus planes. ¿Será suficiente?, ¿se sabrá aprovechar la oportunidad socialmente o de nuevo se quedará la derrama en pocas manos?

LA NUEVA FIEBRE DEL ORO

ESTE miércoles se inaugura la octava versión de la Oil Gas Expo Procura (OGEP), en Villahermosa, presentada por la Coparmex como “líder para la industria del sector energético en sureste mexicano, proporcionando una plataforma única para las 27 nuevas operadoras de la Reforma Energética que operarán desde Tabasco para buscar y mostrar soluciones en toda la cadena de suministro”. Será del 27 al 29 de Noviembre.

Tienen prevista la participación en una serie de conferencias del presidente de la Comisión de Energía de la Cámara de Diputados, Manuel Rodríguez; del ex consejero independiente de Pemex, Octavio Pastrana Pastrana y del geólogo y empresario Iván Sandrea.

Hay quienes consideran que ahora sí Tabasco vivirá el “tercer boom petrolero”, no sólo por las millonarias inversiones para la nueva refinería (unos 8 mil millones de dólares), sino por la reciente aprobación de 200 mil millones de pesos para los trabajos de exploración y extracción de crudo por parte de Pemex en los pozos en tierra y en aguas someras. Además que, se supone, comenzará a sentirse el impacto de las inversiones de las empresas que ganaron las rondas petroleras y que ya operan en la entidad.

Claro, el reto es lograr que esta derrama beneficie a la economía local y sea aprovechada para desarrollar otros rubros.

¿SEMBRAR EN EL DESIERTO?

AQUELLA convocatoria que hizo el escritor venezolano Arturo Uslar Pietri en 1936 y que de alguna manera fue divisa del mexicano Lázaro Cárdenas durante la expropiación petrolera: sembrar el petróleo, vuelve a estar vigente: sembrar petróleo.

Reproduzco aquí unos fragmentos del texto de Uslar Pietri publicado en el periódico “Ahora” (Caracas, Venezuela):

“La única política económica sabia y salvadora que debemos practicar, es la de transformar la renta minera en crédito agrícola, estimular la agricultura científica y moderna, importar sementales y pastos, repoblar los bosques, construir todas las represas y canalizaciones necesarias para regularizar la irrigación y el defectuoso régimen de las aguas, mecanizar e industrializar el campo, crear cooperativas para ciertos cultivos y pequeños propietarios para otros”.

“(…) Si hubiéramos de proponer una divisa para nuestra política económica lanzaríamos la siguiente, que nos parece resumir dramáticamente esa necesidad de invertir la riqueza producida por el sistema destructivo de la mina, en crear riqueza agrícola, reproductiva y progresiva: sembrar el petróleo”.

Fue publicada hace ¡ochentas y tres años! Una consigna que se repite, muchas veces sin conocer el origen, pero sobre todo sin compartir el objetivo.

AL MARGEN

PUDO ser la de ayer una excelente jornada para el presidente Andrés Manuel López Obrador: muy temprano los presidentes del Grupo Carso, Carlos Slim, y del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Carlos Salazar, acudieron a acompañar a AMLO a la presentación del Plan Nacional de Infraestructura, que prevé la inversión en una primera etapa 859 mil millones de pesos en 147 proyectos para los próximos tres años. Están puestas las bases para generar confianza en las inversiones, señalaron los líderes empresariales. Ahora hay que desactivar la nueva amenaza de Donald Trump: se prepara a designar “organizaciones terroristas extranjeras” a los cárteles mexicanos de las drogas.

ES POSIBLE y deseable que cambie el formato de las comparecencias de los funcionarios ante los diputados. Lo decía la oposición de izquierda antes, lo reclama la multicolor (y mínima) oposición de ahora. Ayer acudieron a la cita Silvia Roldán, titular de la Secretaría de Salud, y Oscar Palomera, de la Secretaría de Administración.  (vmsamano@hotmail.com)