Hacia el 5to Informe

Incesantemente se prepara el colofón hacia el quinto informe de Gobierno.

Según, dos son las realidades que en la Persona de Arturo Núñez Jiménez se palpan, se notan y se comentan entre los opinologos y estudiosos de la vida política.

Una, que el recorrido de la alternancia no ha sido un reto menor, y más complejo aún con una ciudadanía empujada por la desesperación de ver un cambio ipso facto –el ciudadano es ansioso para reclamar cambios de fondo, pero muy apático para ser participe y corresponsable de ellos- que no acepta ni está dispuesta a entender de procesos metódicos con tiempos y circunstancias realizables paso a paso.

Núñez Jiménez en su estatura de hombre de Estado entiende que la ola delincuencial es un pendiente del Estado Mexicano, degradado desde sus cimientos y que requiere de estrategias y planes transversales y transexenales, porque fácil seria reclamar auxilio al ámbito Federal y decir que Tabasco no puede sustraerse de la inercia nacional que acontece, pero en apego a su formación y espíritu republicano sabe que en el barco de Gobernar, todos los actores de los tres ámbitos deben ayudarse y buscar alternativas y soluciones a la problemática que aqueja a los gobernados. Colaboración  no colaboracionismo, diálogo y consenso, mas no sumisión ni levantamiento.

En la lectura nuñista se entendió muy bien que las reformas estructurales que emprendió el Gobierno Federal y que le tocarían vivir como gobernador le abrirían un boquete inmediato a su entidad, lo vislumbraba desde hace años cuando gritaba a los cuatro vientos que urgía la despetrolización y muy pocos lo escucharon con atención y lamentablemente ninguno de los anteriores mandatarios lo emprendieron; hoy el desempleo golpea y hace imperceptible para el ciudadano la importante estabilidad económica que mantiene la entidad en materia de gasto eficiente y el sesudo manejo de la deuda ¡heredada por cierto!, y que es una realidad que tendrá efectos positivos en la gestión del siguiente despachante de Plaza de Armas.

Aunque se pretenda decir lo contrario, existe estabilidad política en el ejercicio gubernamental; se ha dejado que la crítica sea abierta y han delineado, detalladlo, aclarado y/o contestado con respetuoso ímpetu.

Se dice que en lo más importante que es la calificación y sentir popular, se ha sido receptivo atendiéndolo y entendiéndolo y no por ello Núñez ha roto su esquema metodológico de ser y hacer política entendida ampliamente desde el aspecto de gobernar para todos.

La segunda realidad que se desliza en el ambiente, es la que marca en el Núñismo un peso significativo en la sucesión presidencial; porque real es que Núñez Jiménez es un actor e ideólogo de peso en las líneas de acción primeramente del PRD y en consecuencia de la postura formadora del Frente Amplio con miras al proceso electoral federal del 2018.

Dejando claro que no se apega a la cultura trepadora, ni suple por nada su responsabilidad con la confianza depositada en su persona en las urnas en 2012, también cierto es que precisamente por su responsabilidad como Gobernador no se le ve placeándose mediáticamente haciendo esfuerzos de concientización entre las fuerzas opositoras para armar un proyecto plural, inteligente y viable para el país, sin embargo no se sustrae de los intentos y se sabe que día a día aporta para alcanzar un consenso que sea rentable política y electoralmente.

Pero más allá de las múltiples conjeturas, lo que se asegura con mayor aplomo es que Núñez Jiménez en ambas responsabilidades históricas le apuesta más a la decisión ciudadana, esa misma a la que por años le ha manifestado respeto, disposición y compromiso.

Zarpazo: La reapertura del Gerontológico y sus diversas actividades es una excelente noticia para los adultos mayores; un lugar donde encontraran empatía y estimulo.