“Indio”, discriminación y olvido de civilizaciones

Los indios hoy son sinónimo de discriminación, no tiene un presente real, al contrario, la referencia lleva camino hacia las personas que son pobres e ignorantes

Tanto la civilización azteca y olmeca están consideradas como una de las herencias más predominantes en la actualidad.

Ambas dejaron huella. En el caso de los olmecas está el juego de pelota con carácter ritual y religioso, la escritura y la epigrafía, la invención del cero y del calendario.

Se considera a la civilización olmeca como “la cultura madre” de todas las civilizaciones mesoamericanas.

Los aztecas por su parte fundaron Technotitlan, y era considerado un estado militarizado que iban expandiéndose cada vez más, convirtiéndose en un gran imperio colonizador, hasta la llegada de Hernán Cortés, quien por primera vez llamó a esos pueblos indios.

El escritor Juan Villoro señala que somos el país de los aztecas (poderosos guerreros importantes), sin embargo, al mismo tiempo no tenemos en la vida cotidiana una relación valorativa, celebratoria de eso. “Mucha gente pobre, en su mayoría indígena, hoy anda vendiendo lo que puede. Algo no funciona, y lo más lamentable es que uno se acostumbra a verlos de esa manera”.

La condición del indio pasó a otra atmósfera. La mirada ahora es diferente hacia ellos. Las señales cambiaron y esas culturas solo se pueden visitar en los museos y ser leídas en libros.

Los indios hoy son sinónimo de discriminación, no tiene un presente real, al contrario, la referencia lleva camino hacia las personas que son pobres e ignorantes.

Es una forma de encasillar a un grupo. Es tratar de someterlos en una burbuja, cuando en realidad su denominación se refiere en parte a los pueblos autóctonos americanos.

En la palabra hay provocación. Recordemos que México fue conquistado por ese mundo europeo, pero lejos de aquella fecha el concepto se fue desvalorando hasta que la palabra en su esencia cultural y social desapareció.

La palabra indio no tiene nada que ver con aquel pasado. En México aún se conservan pequeñas poblaciones llamadas etnias. Una de ellas son los de origen zapoteco, que se encuentran en diversos puntos de Oaxaca. En el país hay casi unos ochocientos mil zapotecos. Están los mixtecas que se ubican en la zona de Guerrero, Puebla y Oaxaca.

Los otomíes en Hidalgo, Querétaro, Guanajuato, Michoacán, Puebla, Veracruz, y el Estado de México.

Los totonacas viven en Veracruz y Puebla, se dice que en el periodo prehispánico, a pesar de cultivar el maíz, solo lo comercializaban porque no comían tortilla.

Los tsotsiles se encuentran principalmente en Chiapas, es una subfamilia y se deriva del tronco maya. Y así como estos grupos están los tzeltales, mazahuas, mazatecos, huastecos, choles, purépechas, chinantecas, Mixes, tlapanecos, tarahumaras, chontales de Tabasco.

Así están los pueblos originarios con sus organizaciones, ventajas y desventajas, todo un mosaico de costumbres e ideas distintas unos de otros, pero considerados como un grupo al que solo se les puede llamar indios, y a veces con mucho desprecio, faltando al respeto a los pueblos originarios y a cada uno de sus integrantes.

 PARÉNTESIS

El director de Pemex, Octavio Romero Oropeza, afirmó que “habrá buenas noticias para Tabasco afortunadamente”. Adelantó que la empresa productiva trabaja en la localización de pozos exploratorios en la entidad y que se pondrán a producir. Respecto al pago de afectaciones por la actividad petrolera, sostuvo que se labora en el tema puesto que el presidente Andrés Manuel López Obrador ha dado la instrucción de que no haya rezago en ese aspecto. Varias son las circunstancias que hacen que Tabasco sea el eje de la actividad petrolera.