La esperanza llegó…

La esperanza llegó…

Se intentó de todo, desde asegurar que solo había uno que le podía competir, hasta pasar por llamar al voto útil y de último al cruzado, y nada funciono, el elector aguanto firme a los embates y voto en una amplia mayoría parejo y decidió “jugársela” por un cambio radical; el electorado sin regateos le compro y demostró que estaba harto de las pifias del PRI, PAN y sus acompañantes, más aún confió y creyó (pasada la elección lo sigue haciendo) ciegamente en las aseveraciones de López Obrador; decía un sexagenario  que “esté (AMLO), o nos saca del hueco donde nos metieron, o nos termina de enterar”, así de cotidiana y exponencial esta la “Fe” en un país mejor.

Al Movimiento de regeneración nacional no le dieron un cheque en blanco, le dieron un espaldarazo sin precedentes e histórico, para que cumpla  cabalidad con las promesas hechas durante la campaña, y es que la Presidencia de la Republica fue acompañada por la mayoría en el Congreso de la Unión, gubernaturas y congresos locales, para que el nuevo gobierno tenga a la mano todos los instrumentos legislativos  y administrativos para marcar un nuevo rumbo, sin pretextos, sin complicaciones mayores por la negociación política y mejor aún, sin falta de legitimidad social, elegidos y electores saben que en la plaza, a ras de tierra la gente quiere inmediatez, ya se verá con que sapiencia se explica desde el encargo que las cosas son con método y en tiempos programados.

Se escucha en tono festivo entre los nativos que es el tiempo de Tabasco, que eso de tabasqueñizar México es lo de hoy (como dice la chaviza), y en serio se debe recalar en que ciertamente la oportunidad para el edén es histórica; por décadas se ha hablado que producto del distanciamiento entre el ejecutivo estatal y el federal es el estancamiento de la entidad, hoy por fin los astros se alinearon y debe ser para que con la experiencia y el discurso de la reconciliación, la cuarta transformación se sienta y en serio en el desarrollo justo y necesario de la entidad.

La dupla de tabasqueños, AMLO en Palacio Nacional y Adán Augusto en Plaza de Armas, tienen el enorme reto de romper con las inercias plutocráticas y de las elites dominantes, eso sí, con una coyuntura critica mayor, pero con la misma intensidad de apoyo del pueblo, ellos, los que gobernarán están llamados a no desperdiciar esta magnífica oportunidad, y que así sea por el bien de México y de Tabasco…

Zarpazo. Caras nuevas en la política; la brisa de Paraíso se siente al frente del congreso…

Zarpazo bis. Esos que denominan “besamanos” a los buenos deseos y alineación de visión de empresarios y líderes sindicales para con el Presidente electo, lo único que denotan es que no escucharon puntualmente a AMLO durante la campaña; las campañas ya terminaron, ahora es justo y necesario que todos jalen para el mismo lado.