Las “caricias” de Trump a AMLO: “Para que la cuña apriete…”

Las “caricias” de Trump a AMLO: “Para que la cuña apriete…”

Después del inesperado primer éxito en política internacional, obtenido por Andrés Manuel López Obrador al enviarle el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, una delegación de primerísimo nivel a la casa de campaña, muchos se preguntarán a que se debe. Para entender en su total dimensión este hecho histórico es conveniente saber cómo se expresaba, ayer 15 de julio, el diario El País sobre el presidente Trump: “Eres un líder muy ineficaz, has tomado una decisión absolutamente terrible”. Podría escribirse esta frase como una declaración más de las realizadas por Donald Trump esta semana durante su viaje a Bruselas y Reino Unido y a nadie le chirriaría. En junio, Trump abandonó la cumbre del G7 acusando a los aliados de “robar” a EE UU y llamando públicamente débil, dócil, blando y deshonesto a su supuesto socio, vecino y aliado, el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, por la disputa comercial. Su paso por Bruselas y Londres ha causado otra conmoción. Llegó a la cumbre de la OTAN como una apisonadora, acusando a Alemania ante las cámaras de televisión de ser cautiva de Rusia por su dependencia energética. Forzó a cambiar el guion de las reuniones para centrarlas en su exigencia de aumento de gasto en defensa y amenazó con romper la alianza. Aterrizado en Reino Unido para reunirse con Theresa May, humilló a la primera ministra británica, en un momento de gran vulnerabilidad para ella, con una entrevista incendiaria en The Sun, en la que atacaba su plan de Brexit y resaltaba que Boris Johnson, el exministro recién dimitido, sería “un gran primer ministro” porque “tiene lo que hay que tener”. ¿Por qué el presidente Trump trata de esa manera a sus aliados, humilló a Peña Nieto al principio de su mandato, y ahora, con López Obrador, aún a la espera de tomar posesión como primer mandatario de México, lanza todos sus misiles repletos de amabilidad y buenas maneras? Primero de todo el principal asesor en la sombra de Donald Trump es un viejo empleado de AMLO: Rudolf Giuliani, ex alcalde de New York y asesor de seguridad con López Obrador cuando fue jefe de Gobierno del DF. De ahí nació una fructífera amistad que hoy ha dado esos magníficos frutos. Pero además Trump no quiere cometer el error de algunos de sus antecesores al minimizar a Venezuela o Cuba que iniciaron sus transformaciones hacia la izquierda al sentirse abandonadas por USA. Trump les ha comentado a sus cercanos que ve en AMLO mucho parecido con su forma de hacer política y por eso llama al presidente Electo de México “Juan Trump”. Lo cierto es que lo que ha demostrado es un extraordinario respeto, lo que augura una buena relación. Al menos se puede decir que se entenderán. Y ya se sabe que “para que una cuña apriete tiene que ser de la misma madera”. Trump ha roto todos los códigos de la diplomacia, excepto en México, a donde  quiere, o eso dice, levantar un muro de separación con su país. Los presidentes de EE UU han solido disfrutar la política exterior. “Es el área en el que gozan de más margen personal”, explicaba Zbigniew Brzezinski, que fue consejero de Seguridad Nacional de Jimmy Carter. Y de esa manera Trump ha planteado la relación con Andrés Manuel López Obrador: De forma personal. Son muy buenas noticias cuando ni siquiera AMLO ha comenzado en la Presidencia de México de manera formal.

Por Antonio López de la Iglesia