Lo decidirá la gente.

Lo decidirá la gente.

En la campaña local, se ha confirmado que nadie camina como el candidato frentista Gerardo Gaudiano, al joven ex alcalde sus adversarios “no le ven ni el polvo”; cierto es que ya dejo patente que es una convicción y personal forma de entender el contacto ciudadano, y en el seno del “war room” saben que es la mejor arma para darle primeramente equilibrio y después rebase a la contienda.

En el seno de los simpatizantes del frente se dice de manera jocosa, presuntuosa y divertida que la vitalidad y ritmo que la agenda de campaña evidencian “no la tiene ni Obama”; Gaudiano Rovirosa además de competir e independientemente del resultado, dejará la vara muy alta para todo aquel que en el futuro aspire a ser candidato, y no se debe negar (ni por sus adversarios) que la energía del abanderado sin duda es un aliciente esperanzador para una militancia que sigue urgida de progreso y de mejores condiciones de vida para su familia, para sus vecinos y sobre todo para Tabasco.

Sabido es que en una campaña se explotan las fortalezas y se mitigan las debilidades, es esto una regla de vida que aplica a todos los ámbitos de competencia, por lo que en un análisis serio y neutral se debe decir que en toda campaña política primeramente se vale distender la percepción o los llamados “negativos” y segundo, que  la decisión de utilizar un color distinto a los que los partidos del frente utilizan, no es otra cosa que la firme convicción de mandar un mensaje de empatía, de que en la práctica política se debe privilegiar las propuestas y la energía para conectar con la gente, antes de pretender soportar el “derecho” a aspirar, por la designación de grupos o de personajes.

Quienes atacan al candidato frentista por lo que llaman “rehuir” o renegar de sus colores y orígenes, dejan de lado en su intestina critica que el “hombre” no se ha movido ni un ápice de su decisión partidista y de su convicción militante, que mayor prueba de arraigo, que la que materializa su decisión y tenacidad para haberse hecho de la candidatura de su partido.

En tanto, se debe resaltar la civilidad política de todos los contendientes, y el candidato del Frente no es la excepción, por ello no se distrae en los aspavientos, él está centrado a caminar y hasta correr lo más que se pueda para dialogar con la gente, para decirles cara a cara porque quiere gobernar la entidad, pero más aún para escuchar de primera mano los anhelos, reclamos y demandas que la ciudadanía tiene; Gaudiano Rovirosa sabe que “estar donde lo necesita la gente” implica que tiene que convencer a la mayoría de los ciudadanos que él representa una nueva forma de gobernar, porque en los tiempos que se viven lo que la gente necesita es tener a gobernantes con capacidad, energía, pulcritud y decisión, por ello no es “locuaz” ni descabellado llegar a todos los rincones en busca del voto que permita llegar a ser el Gobernador constitucional del estado de Tabasco, eso sin duda lo decidirá la gente…

Zarpazo. Deberá ser productivo y enriquecedor para la democracia que el debate presidencial haya tenido tal audiencia y seguimiento.

Zarpazo bis. Pluralidad si, autoritarismo no; ¿pero cómo lograr la primera ante los bandazos ideológicos? Precisamente esos “bandazos” acechan…