Los retos de la elección (IV)

Los retos de la elección (IV)

Tradicional superviviente a cismas, dónde las rupturas y la división son divisas diarias, el PRD enfrenta la coyuntura más compleja desde su fundación: desplazado del poder, con sus liderazgos más connotados -viejos y neos- renunciando para afiliarse a otras fuerzas políticas, sin recursos, pero sobre todo, sin una clara definición ideológica, porque no sabe si presentarse o no como un partido de izquierda, ello debido a que los cuadros que hoy en lo local lo comandan, no tienen el empaque, bagaje ni empuje para erigirse como un referente, ni un afluente discursivo de largo y sostenido alcance.

El presente del Sol azteca choco está más enredado que una “mata de chayote”, por un lado, lo domina un grupo que desde antaño mostro sana distancia con Arturo Núñez -al que nunca sintieron suyo- y que post derrota del 18, al recuperar el control partidario radicalizaron como parte de un rompimiento con el antecedente gubernamental más próximo, que dejo mucho que desear y que al parecer podría significar un debut y despedida para un partido combativo y de gran presencia social como el PRD; otra figura que ya no está con ellos, es su reciente abanderado a la gubernatura, y es que decidió seguir corriendo, y con ello buscar nuevas rutas que le permitan seguir en el ánimo; al PRD, solo le quedan liderazgos regionales de impacto medio, y en la cima estatal se percibe desde años que el actuar del líder se decanta siempre por una línea mercantilista, antes que político-social.

Aun así, la base es su mejor activo, el gen resistente de una paisanada comunal que por orgullo sigue firme y decidida podría darle un respiro significativo; al menos en Jonuta se ve firme la reelección de Tito Filigrana, quien, aunque de arranque anuncio que su municipio seria el bastión partidario, de apoco entendió que su mejor apuesta seria la de “institucionalizarse” con el poder estatal, y esa alianza de facto lo podría mantener en la silla municipal; por otro lado, la Chontalpa podría significar un bastión solaztequista, si en una de esas las fuerzas coordinadas que al menos si han mostrado Sabino Herrera, Nelson Gallegos Baca, Neyda Beatriz García, Héctor Peralta Grappin, Roberto Ocaña y Ana Luisa Castellanos, logran conjuntar operatividad con hartazgo ciudadano, ante los grises resultados de las autoridades municipales en funciones. Por otro lado, Elio Bocanegra pareciera que tiene puesta la mesa para esta vez si hacerse de  la alcaldía de Macuspana, ya ha acopiado recorrido, trabajo y estructura como para dar la campanada, no lo descarten. Eso sí, en esa bola no hay un referente ideológico que se hecha a cuestas la conducción partidista hacia el futuro, y eso es algo que se debe atender, en el supuesto de que terminado el cómputo total, aún se tenga supervivencia.

En Centro, todo apunta a que el partido tendrá la peor participación de la historia moderna, y es que lo de Manuel Andrade suena a mucha vacilada y seria el epítome de una muerte anunciada (partidista y la política del exgober), aun cuando los más impetuosos ven un resquicio vía candidatura común con el PVEM; “primero que se dé y de allí ya se verán las maromas para justificar el absurdo”, nos decía una voz añeja de la lucha social.

En los corillos internos, se dice que la corriente focilista ve con desesperación como se desvanecen sus cálculos de posicionamiento de activos vía las pluris, ya que una pírrica votación en centro y el repliegue de la estructura Gaudianista, sin duda impactará en la circunscripción que Juanma tenía en la mira.