No más cálculos políticos…

No más cálculos políticos…

Ni tigre, ni diablo, pero si el próximo Presidente de la Republica se enfrentará a severos problemas que mantienen anclado y a punto de irse a las profundidades al país; y es que lejos de cómo y de con qué dinero cumplirán sus múltiples promesas “populistas”, lo verdaderamente trascendental es como combatir de verdad por medio de un andamiaje institucional sólido, independiente y poderoso a la corrupción; cómo lograr que en un plano de igualdad se pueda negociar con EEUU a sabiendas de que un fracaso en las negociaciones del TLCAN acarrearía inmediatamente una crisis en los mercados que impactaría en las finanzas del país, con ello lo seguro es más pobreza y caos; cómo lograr bajar los índices de violencia que tan solo en el proceso electoral cobraron la vida de más de un centenar de candidatos y que en el sexenio saliente se ultimó a más de 109 mil mexicanos, ¿cómo consolar a esos deudos? ¿Cómo proveerles de justicia? ¿Cómo desarticular un poderosísimo mercado de la droga que genera raudales de ingresos? ¿Cómo desarmar a miles de ciudadanos que ante la falta de oportunidades están al servicio de la delincuencia?

Como logrará reducir la brecha social, cuando más de 50 millones de mexicanos viven en pobreza y muchos de ellos ya son adultos mayores, sin dejar de lado que urge despolitizar el ambiente, para dar verdadero paso a la administración, a la conducción gerencial de los asuntos del estado.

Los clásicos mexicanos dejaron cincelado en el refranero o muro de citas, joyas como aquello de “ya se nos viene eso de la política” o como aquello que Díaz enunciaba con orgullo “poca política y mucha administración”; el gran problema de la clase política mexicana es que al día siguiente de saberse favorecidos por el voto popular, empiezan a maquinar su siguiente “paso político”, empieza la planeación transexenal y se murmuran entre sus íntimos de que han llegado para instaurar un régimen de no menos de 30 años, “de aquí saldrán, de este equipo saldrán cuando menos los próximos cinco presidentes” se ufanan cual cofradía hegemónica; y es precisamente es allí donde se debe recalar, la realidad social de este país no soportará más a aquellos que administren en función de cálculos políticos, porque allí hasta los líderes que amenazaban con soltar a diablo o tigres, serán devorados por la furiosas garras ciudadanas…

Zarpazo. La FEPADE no se dará abasto; y es que también será histórico el índice de denuncias que reciban,

Zarpazo bis. El peso se envalentona en la ruta más crítica del proceso electoral; la veda le da un gran respiro…

Zarpazo rebis. Los expendios de bebidas alcohólicas haciendo su “agosto” por la ley seca de próximo fin de semana. Tranquilos si no es el fin del mundo…