Pobreza, un problema con varias aristas… difícil de controlar

Pobreza, un problema con varias aristas… difícil de controlar

La pobreza nunca será un tema agotado. Estará vigente por muchos años, quizá hasta que las personas que manejan la política de este país, piensen por un segundo en los miles de mexicanos que apenas cuentan con el sustento diario.

Propuestas como aumentar el salario mínimo no es la solución, ni tampoco crear más apoyos sociales, porque la experiencia dice que la mayoría son usados para otros fines, muy alejados de su verdadera convicción.

Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), los altos niveles de pobreza e informalidad, las bajas tasas de participación femenina en el mercado laboral, la insuficiente calidad educativa en las áreas menos favorecidas y la exclusión financiera, juegan un papel importante para entender el bajo nivel de movilidad social en México.

De acuerdo ese reciente reporte titulado ¿Un ascensor social roto?: Cómo promover la movilidad social en México, el 48% de las personas cuyos padres se encontraban en la posición más pobre de la población, terminan su vida en la pobreza, o sea, en el último quintil socioeconómico.

“Los mexicanos tienen menos oportunidades de pasar del 20% inferior de la distribución del ingreso, a la parte media de la misma, en comparación con Brasil, China, Indonesia y Sudáfrica, lo que indica una mayor persistencia en los niveles de ingreso más bajos. Al mismo tiempo en México, los riesgos de caer al quintil más alto de ingresos a niveles medios de ingreso, son bajos”, explicó el documento.

“Considerando los actuales niveles de desigualdad y la movilidad intergeneracional de los ingresos, el niño de una familia pobre necesitaría por lo menos cinco generaciones para alcanzar un nivel medio de ingresos, en promedio en los países de la OCDE”, precisó el documento.

En el último debate donde se presentaron los candidatos a la gubernatura, hicieron referencia precisamente sobre el tema de la pobreza, y coincidieron reducirla.

Andrés Manuel López Obrador comentó que es necesario acabar con la corrupción para terminar con la pobreza, lo que dejaría entre 300 y 500 millones de pesos.

Entre sus ejes planteó que se deben bajar los suelos de los altos funcionarios y aumentar los sueldos de "los de abajo". Invertir en el campo, pues aseguró que existen los recursos naturales y humanos. Creará además una bolsa de 600 a 800 mil millones de pesos para las empresas que den empleos.

Ricardo Anaya mencionó que las personas deben tener un ingreso personal.   Incrementar la inversión. Duplicar el salario mínimo para que haya crecimiento económico indispensable.  

Por su parte, José Antonio Meade sostuvo que en cuanto a seguridad social esta sea deducible para los patrones, y así se incorpore a las trabajadoras del hogar. Continuar con la Estrategia Nacional de Inclusión, ya que argumentó que entre 2014 y 2016, cerca de 2 millones de personas dejaron la pobreza moderada y extrema.

La realidad es que en México hoy existen más de 50 millones de personas que viven en pobreza, y como menciona el estudio de la OCDE, es difícil que salgan de ese profundo abismo.

PARÉNTESIS

EN esta semana continuarán los cierres de campaña. Será de encantos y desencantos para algunos. Los rumores de que cierto candidato dejará en el camino su trabajo político crece, mientras los otros abanderados meten el acelerador hacia la última vuelta.