Puntos Suspensivos

Evaristo, nueva oportunidad, nuevos paradigmas un mayor reto…

Evaristo Hernández Cruz regresó al Palacio Municipal como alcalde por segunda ocasión. Primero lo fue por el PRI y ahora por Morena. En su primera oportunidad tuvo un fuerte enfrentamiento con el químico Andrés Granier Melo, de quien dijo: “no me dejó gobernar a plenitud”, sin embargo, destacan las plantas potabilizadoras y la entrada del Dragón en las principales de la ciudad de aquel trienio. Contra Evaristo se armó entonces una feroz campaña, cuyos efectos aún pesan en la percepción de algunos ciudadanos.

Durante sus recorridos en la campaña hacia julio del 2018, y con la fuerza de Andrés Manuel López Obrador, el ex diputado prometió acercarse más al pueblo, darles mejores calles, carreteras, alumbrado, volver a los desayunos escolares, tener un mejor drenaje, por esa razón, sostuvo que cambiaría la red del primer cuadro de la ciudad.

Los ciudadanos quieren ver obras, caminos en buen estado, una mejor imagen por donde caminan, seguridad, y sobre todo, disfrutar cada lugar del municipio con sus familias.

Uno de los programas que llama la atención es la escuela de oficios, que si bien funciona ayudará para crear más autoempleos sobre todo en las villas y comunidades, donde la gente poco a poco emigra a la ciudad o se queda en la nada.

El nuevo alcalde no se equivocó en su toma de protesta ayer al decir que no hay tiempo, que es urgente establecer acciones para empezar desde el primer minuto, pero sobre todo donde existe más vulnerabilidad.

“La gente de Centro exige un gobierno que cumpla, que dé resultados, no un gobierno que se esconda en sus oficinas, y que además debe ser sensible para atender las necesidades”, indicó.

Durante un masivo evento de toma de protesta y ante los funcionarios que lo acompañarán, ayer dijo que devolverá los beneficios sociales con servicios para todos.

El municipio deberá entonces arraigar la democracia como una forma de vida en los lugares más apartados, o donde no llega ni el agua. Pero también entre los vecinos de las colonias para que haya una nueva cultura social y política.

Por lo tanto, el municipio tiene que buscar su autonomía, bajo estrategias y proyectos concretos que convenzan a sus habitantes.

¿Es una nueva oportunidad para empezar otra vez? ¿Será que al fin Centro pueda atraer turismo, y quienes aquí vivimos nos podamos sentir orgullosos?

La oportunidad está en la mesa, solo se necesita aplicarla, y que el equipo de Evaristo Hernández lo entienda de esa manera, y desde ahora tengan una mentalidad de evaluación temprana, no solo de memoria sino que exista la seguridad que afuera un pueblo los estará vigilando.

Evaristo Hernández sabe –de acuerdo a su experiencia- que se necesita un rescate de fondo, integral, pero de la mano con sus habitantes.

Los errores que cometa Morena y especialmente sus gobernantes serán aprovechados una y otra vez por los expertos en desestabilizaciones. Es la lucha política, no hay sorpresas.

Ahora es momento de ordenar y enfrentar lo que en campaña se prometió, los puntos importantes que se recogieron de la población, y como una intervención quirúrgica, ir saturando las heridas.

PARÉNTESIS

Lo que faltaba. Ahora la zona donde se construirá la refinería en Paraíso se convirtió en un panal de avispas. Salieron, al menos, diez sindicatos para disputarse la plaza, y advirtieron que se podrían radicalizar para que les den empleos. Un aviso a tiempo. Los inversionistas son muy sensibles a este tipos de señales. (kundera_w@hotmail.com)