Qué cambiará luego de ser vacunados contra el coronavirus

La vacuna llegó a Tabasco. Una larga fila se hizo presente afuera del Hospital Juan Graham Casasús

La vacuna llegó a Tabasco. Una larga fila se hizo presente afuera del Hospital Juan Graham Casasús. Médicos, enfermeras, trabajadores de mantenimiento, entre otros, adquirieron la dosis.

Algunos fueron muy francos, y dijeron que les daba algo de temor sobre las reacciones que pueden causar la inoculación.

Otros se notaron extrañados, como no creyendo que estaban formados para recibir un antídoto contra el coronavirus.

¿Volverá la vida a la normalidad de quienes fueron vacunados? Sería interesante conocer qué cambiará en estas personas.

Después de un largo viacrucis viviendo casi todos los días con la enfermedad, porque al estar trabajando en un nosocomio, es como jugar a la ruleta rusa, y luego saber que por el momento se está blindado, ¿será causa de sorpresa?, ¿de poder dormir mejor porque se creerán inmunes?

Para algunos especialistas la vida volverá a la normalidad sólo cuando la sociedad en su conjunto obtenga suficiente protección contra el coronavirus.

Ahora se trata de un pequeño porcentaje, quienes igual deberán seguir con los protocolos de cuidado hasta que crucen esa línea que marque estar fuera de peligro.

Los científicos aún no saben si las vacunas también bloquean la transmisión del coronavirus. De ahí la alerta general.

Las personas vacunas tendrán que seguir pensando en sí mismas. No podrán borrar de sus mentes a todos esos pacientes que fueron intubados, y que la gran mayoría perdieron la batalla.

El proceso será largo. Tedioso. Lleno de incertidumbre. Quizás puedan regresar a sus hogares con más confianza, pero lo mejor sería esperar hasta que toda su familia esté vacunada, por el momento no hay planes de proximidad, al contrario, por sus experiencias, son quienes más cuidado deben tener.

Por el momento sólo existe la preocupación de los efectos secundarios en el cuerpo. Si habrá calentura, hinchazón, comezón, vómito, dolor de cabeza, etc., pero no se habla del interior, de lo que sucede más allá.

Porque esas personas que se mantienen en la primera línea cuidando a los enfermos en las llamadas burbujas, igual se enfrentan a sus propios temores, a esos miedos de perderlo todo ¿a cambio de qué?, cuando ven que afuera el grueso de la población sigue divirtiéndose en fiestas y el consumismo.

La lucha entonces es doble, doble por la rabia y el sentir no poder hacer nada para que de una vez por todas, la población entienda la magnitud del problema, que al final recae en un hospital COVID.

La decisión de que se iniciara con ellos este proceso es más que acertada. No se les puede quitar ningún mérito, al contrario, porque la sociedad sabe perfectamente que lo merecen.

Un reportaje del New York Time con fecha 21 de abril de 2020, y escrito por Donald G. McNeil Jr., indica que no volveremos pronto a nuestras vidas de antes, según una veintena de expertos. Pero hay esperanza en el manejo del flagelo ahora y en el largo plazo. Además de que nadie sabe con certeza a dónde nos llevará esta crisis que tanto nos ha golpeado.

PARÉNTESIS

Al ser cuestionado sobre si ya se aplicó la vacuna contra COVID-19 el secretario de Gobierno en Tabasco, José Antonio de la Vega Asmitia señaló que aún no, y se vacunará cuando le toque el turno. Informó que en próximos días cumplirá 58 años, por lo que estimó que de acuerdo a la programación de la Secretaría de Salud podría ser vacunado entre los meses de febrero y marzo. A cada quien según corresponda, sin influyentismo, dijo el presidente AMLO. (kundera_w@hotmail.com)