¿Qué militancia en horas aciagas?

¿Qué militancia en horas aciagas?

Como bien lo refirió Candita Gil, las desbandadas y renuncias en general, no son privativas del PRI sino de todos los partidos políticos.

Y es que en la definición de candidaturas lo que más terror les da a los institutos es el nivel de berrinche que sus cuadros van a presentar.

Perder activos y los fieles de ellos, siempre significará un reto electoral que se tiene que atajar de la mejor manera; hay posicionamientos de “soberbia” (el momento no permite flaquezas, dicen los estrategas) donde se ha llegado a asegurar que él o los que se van no representan nada y que es mejor que se hayan ido con su ponzoña a otro lado, pero también los hay, donde se lamenta la decisión del eyectado y se reconoce la perdida. En tanto a donde llegan son recibidos con bombo y platillo, y además son presentados como la panacea de la democracia y de la competencia leal y democrática.

Sin embargo, hoy los que acaparan las miradas y mantienen atentos a muchos, son los que a pesar de hacer berrinches, despotricar y patalear sin recato, anuncian que no reconocen los resultados, ni al candidato designado, pero que se quedaran en el instituto que los “despreció” a ellos y a su gran bagaje y penetración electoral.

Nos decía un analista de los movimientos político-electorales, que ese momentum de cada tres y seis años, ya pintoresco, de amagues, rabietas, clarividencia –porque una vez que les notifican que no son los beneficiados con la encuesta o el dedo divino, les entra un temple de claridad y despotrican contra el tirano, antidemocrático, rompe unidad, alevoso, fomentador del cuatismo y las cuotas, traidor, y todos los improperios existentes hacia el partido, líder o dirigente, que días atrás abrazaban, ensalzaban y vitoreaban- es un fenómeno político y de comportamiento que ha llegado para quedarse, y más aún para ponerle morbo y sazón a la sucesión gubernamental.

Liliana Madrigal, Lorena Beaurregard, Cesar Rojas, Ady García, Candelario Pérez, María Estela de la Fuente, Oscar Ferrer, Humberto de los Santos, Candelaria Pérez, Diana Calzada, por citar algunos, auspician la duda de que tipo de militancia ejercerán en las horas aciagas; ya varios mal intencionados están haciendo sus apestas para ver quien juega más y mejor el papel de Caballo de Troya…

Rosetitas. Ahora resulta que salió “pior” que se llevaran a Herrera Concha de la delegación de la SCT de la entidad; el gremio acusa que el fuereño delegado trae a sus paisanos para darle apapachos en tierra ajena, excluyendo a los locales; bien dice el refrán popular “nadie sabe lo que tiene, hasta que lo ve perdido”.

Zarpazo. A AMLO el desafuero lo subio como la espuma; en Anaya, ¿la celeridad de la PGR y el SAT, causara el mismo efecto?

Zarpazo bis. En una competencia como la que se avecina, se requiere a los mejores en las boletas, y en la Chontalpa Acosta y Herrera garantizan buena pelea.