Salvado el obstáculo de “recesión técnica”; el plan está funcionando, sostiene AMLO

Salvado el obstáculo de “recesión técnica”; el plan está funcionando, sostiene AMLO

*Cifras del INEGI dan un respiro a la economía, motivan confianza

*López Obrador defiende el modelo de austeridad y programas sociales

*Refinería en tres etapas; la segunda será mayor generadora de empleos

 

COMO señalamos en un comentario anterior, el INEGI dio a conocer ayer sus estimaciones del Producto Interno Bruto (PIB) y en términos generales se concluye que México libró la llamada “recesión técnica” por haber logrado frenar la caída de la economía y obtener un ligero crecimiento promedio. Aunque para los críticos del régimen un crecimiento en el segundo semestre del 0.1 por ciento es mínimo, resulta determinante para calificar si existe recesión o no.

El presidente Andrés Manuel López Obrador subrayó en su conferencia mañanera del martes y en otras participaciones públicas que “no les funcionó su pronóstico a los expertos” quienes estimaban que “se iba a caer la economía, que íbamos a entrar en recesión”. Apoyada en el sector terciario (los servicios), la economía nacional tuvo resultados positivos. ¿Es insuficiente?, puede ser, pero veníamos de una contracción del 0.2 por ciento en el primer trimestre

El dato es importante porque en los últimos meses del gobierno de Enrique Peña Nieto aparecía el riesgo de un tobogán: del tercer al cuarto trimestre la economía mexicana pasó del 0.8 por ciento al 0.3 por ciento. Si a esto añadimos que vivimos la transición de un régimen a otro, con todos los riesgos y las ventajas de una alternancia, varios especialistas coinciden en que hay motivos para el optimismo.

Dijo AMLO que “muy contrario de lo que se piensa, ya ven que se insiste mucho en que no hay crecimiento porque no hay gasto, esto demuestra que con austeridad, gastando bien, se puede crecer”.

FRENAR CAÍDA Y AVANZAR

AYER le comentaba que Arturo Herrera, secretario de Hacienda, anunció la disponibilidad de 485 mil millones de pesos para un plan del segundo semestre de este año mediante el que se busca “dinamizar la economía en 2019”, de manera que inclusive se comiencen a otorgar licitaciones en octubre y noviembre de para que otro gasto se aplique en enero, “para adelantar la inversión”, señaló.

Para el común de la población, los tecnicismos económicos así como sus cifras y estimaciones macro le dicen poco o nada. El mejor juicio proviene del bolsillo: se tienen o no se tienen recursos para vivir.

Sin descartar la importancia que para el funcionamiento de sistema financiero tiene la confianza reflejada en las cifras, López Obrador ha insistido en que su gobierno parte de un enfoque distinto de la “reactivación económica”.  Se trata, señala de un gasto bien orientado, a los que más lo necesitan”, porque esto es reactivación de la economía “nada más que abajo, porque lo que queremos es una modernidad surgida, forjada desde abajo y para todos”.

Es un modelo, insiste AMLO, que no alcanzan “a entender los tecnócratas neoliberales” donde “el crecimiento se convierta en desarrollo”, que haya más empleos, más consumo local y un mercado interno fortalecido.

DESARROLLO COMPARTIDO

EL OPTIMISMO de López Obrador tiene sus bases: el peso mexicano es la moneda que más se ha fortalecido en el mundo con relación al dólar en todo este año. Recordemos que el gobierno de Peña Nieto recibió la moneda nacional en una cotización de 12.92 por unidad y terminó en 20.26 en promedio, una depreciación de casi el 60 por ciento.

Otro dato relevante es que la inflación está a la baja y se reporta un aumento en el consumo popular, al igual que un incremento de salario en términos reales; es cierto que existen registros de un considerable número de despidos del servicio público, pero oficialmente se reporta una mayor planta laboral contratada en general. El debate es porque en este rubro se incluye a quienes participan en los programas federales como “Sembrando Vida” (200 mil) y  “Jóvenes sembrando futuro” (900 mil). El plan anunciado por el titular de la SHCP va también enfocado a mejorar la oferta de empleo.

El sindicato patronal Coparmex tiene sus propios datos. Aunque su dirigente Gustavo de Hoyos –permanente crítico de AMLO-, celebró que México no esté en “recesión técnica”, reiteró que es posible “crecer a una tasa mucho mayor”, pero siempre “generando confianza y si se preserva la estabilidad macroeconómica”. En el primer caso, la confianza, es un elemento abstracto y manipulable; en el segundo, hasta el momento existe estabilidad. Todo es frágil, pero lo puede ser tanto como lo quieran los protagonistas.

AL MARGEN

HOY INICIA lo que sería la segunda etapa en las obras de la refinería en Dos Bocas, Paraíso, de acuerdo a lo anunciado por la secretaria de Energía, Rocío Nahle. La primera fue la adecuación del terreno. Aseguró que se cuenta con el estudio de impacto ecológico y la licitación de cinco de los seis contratos para la obra, de manera que no hay problema pasar a la ingeniería de construcción y la tercera será la operación. El costo total se calcula en 8 mil 134 millones de dólares, de los cuales 4 mil 587 mdd serán para la construcción de las plantas, 2 mil 192 para servicios auxiliares y mil 356 para su acondicionamiento.

Según explicó el gobernador Adán Augusto López, será cuando se realice la “parte fuerte de la construcción de la refinería”, con una intensiva utilización de mano de obra, cuando se vean los efectos de esta obra en el empleo. Pero también, señaló, a mediano y largo plazo requerimos generar inversión privada que permita sustituir la dependencia de la actividad petrolera.

Una de las cuestiones que deberán atenderse es precisamente el motivo de la polémica reforma al Código Penal y que ayer fue respaldada por las organizaciones empresariales: la existencia de supuestos sindicatos y pseudolíderes que pretenden controlar los contratos y las obras. (vmsamano@hotmail.com)