Semana Santa, o semana de mayor contagio de coronavirus

La amenaza de una tercera oleada de coronavirus es latente. Por más que las autoridades advierten de los posibles contagios se hace oídos sordos. 

Una medida razonable fue la que dio el gobernador del estado, Adán Augusto López Hernández, hace unos días, que por decreto todas las playas y balnearios quedarán cerrados con el fin de evitar la propagación del Covid 19. 

Especialistas en la materia de salud lanzaron la advertencia: con la salida de vacaciones en esta Semana Santa seis de cada diez mexicanos quedarían vulnerables a contagiarse. 

Un buen porcentaje de la población aún permanece en riesgo. De ellos, la gran mayoría podría perder esta batalla. Así de seria sigue esta enfermedad 

El llamado de las autoridades se viene dando desde hace unos días, todo es cuestión de entender la problemática en la que hoy vivimos por el padecimiento que lleva más de un año entre nosotros. 

Lugares como Jalisco, Oaxaca y Guerrero (Acapulco) siguen recibiendo turistas, sin embargo, no están llevando a cabo una campaña fuerte de prevención, ponen por encima las divisas económicas que les dejará ante la vida misma. 

Por otro lado las vacunas siguen su curso, aunque todavía no son suficientes para cubrir a la población, razón por la cual es necesario seguir con las medidas de seguridad. 

Aunque las personas vacunadas deben esperar la segunda dosis para estar por completo inmunizadas, a la vista de muchos no se está siguiendo el protocolo. 

Sobre las vacunas, de acuerdo a los reportes, desde el pasado 23 de diciembre han arribado al territorio nacional más de diez millones de dosis, siendo las personas que laboran en hospitales y las de la tercera edad, quienes ya recibieron una primera vacuna. 

Solo en Campeche una parte del gremio educativo ya recibió una primera y segunda dosis. 

Hay que hacer énfasis en la aplicación, ya que la protección no es inmediata, el beneficio se da hasta las dos semanas de la segunda dosis. El llamado es para que la gente no se relaje y piense que está del otro lado, salvado, inmune, cuando eso pasa a ser una falacia. 

Lo ideal es continuar usando el cebrebocas y mantener la sana distancia, sobre todo porque apenas va un cinco por ciento de la población inmunizada. Se tiene estimado que cuando se lleve un 70 u 80 por ciento, entonces se podría decir que estaremos a salvo. 

La otra atención que se debe hacer es que el virus ya presenta variantes, lo que hace más peligroso el asunto, porque los científicos todavía las están estudiando, así como la efectividad de estas vacunas. 

Lo que menos se quiere es caer en los hospitales, sobre todo porque una de las respuestas en esos centros es la intubación, donde dos de cada diez puede salvarse. 

Las salidas a un balneario o playa pueden esperar. Además, el quedarse en casa es como querer seguir vivos porque el riesgo es menor. 

PARÉNTESIS 

La ecoansiedad es el miedo crónico al desastre ambiental, que puede llegar a ser tan insoportable que requiere ayuda profesional. La crisis climática provoca que el 95 por ciento de los jóvenes de México hayan experimentado sentimientos negativos, como ansiedad, ira y frustración, según la Encuesta Nacional de Juventudes sobre Cambio Climático. (kundera_w@hotmail.com)