Socializando los proyectos.

Sana o no, la mofa nunca falta entre los mexicanos, dicen que hasta ante la tragedia en este pueblo también hay tiempo y disposición para sacar algo chusco, que aligere la carga y el dolor. Los que empezaran a gobernar en poco tiempo, verán que pasaran de la recalcitrante y férrea oposición a ocupar la silla que todos y en todo momento observan, critican y exigen, así que nadie se asuste porque desde ya se cuestionan las decisiones o los anuncios, críticos y criticados deberán cultivar la paciencia, y mejor aún deberán reconocer cuando se equivoquen o acierten.

El presidente electo de Centro generó polémica con sus declaraciones sobre obras y proyectos que trae para echar andar en su gestión, vimos pues como de inmediato saltaron los que lo apoyan, los que lo rechazan y los que dedicaron parte de su tiempo e ingenio para hacer “memes”; se debe considerar benéfico que ante lo público todos se interesen, y más que los que conducirán los dineros del pueblo abierta y transparentemente socialicen sus acciones, para tener el pulso de lo que la ciudadanía piensa y dice; ya hay quienes en su afán de crear conflicto auguran un caos en las gestiones, por el diferendo que la población manifestó en estos días en redes sociales, a esos agoreros del caos, si se les debe erradicar, porque una cosa es el debate sensato y necesario y otra es que por una propuesta que no es bien acogida, todo lo que se haga va estar mal.

Indudablemente se tienen que impulsar proyectos innovadores y atrevidos para que la ciudad capital sea atractiva para el turismo, y no solo se vea como un lugar de visita obligado por la inercia en el tema energético que se prevé tendrá; con buen tino el Gobernador electo despresurizo el asunto declarando que “…seguramente ya ellos verán al momento en que se empiece a plantear la disposición presupuestal, qué proyectos son viables y qué no”... y también se refirió hacia Evaristo Hernández como un profesional y que con la experiencia que tiene, sabrá priorizar. Se nota pues que no se desgastan, escuchan lo que la gente dice, y además están concentrados en delinear como aportaran a la cuarta transformación.

Zarpazo. Miles regresan a clases, en un momento de grandes problemas financieros…