Un domingo con alta votación; se espera la máxima participación

Un domingo con alta votación; se espera la máxima participación

*El 2012 más del 64 por ciento del electorado en las urnas

*Tabasco, Yucatán y Chiapas, las de mayor afluencia ciudadana

*La inconformidad puede ser constructiva en la democracia

LAS ELECCIONES de mañana domingo han sido calificadas anticipadamente como históricas. Lo mismo se dijo de los comicios generales del 2012. Hay diversos elementos que le otorgan un significado especial a estos comicios. No sólo porque se disputan el mismo día unos 3 mil 400 cargos públicos, sino también por los costos, la aplicación de una nueva legislación, el entorno de violencia contra personajes políticos y un ambiente social de crispación. Entre muchos otros.

Hay, lamentablemente, signos de preocupación como el asesinato de políticos y –en las horas recientes- el robo de boletas por comandos armados en por lo menos siete estados del país.

A pesar de todo, se espera que tengamos una participación copiosa de votantes. En los comicios del 2012, cuando también se eligió Presidente y Tabasco tuvo por primera vez unos comicios homologados –el mismo día se sufragó por gobernador, diputados y alcaldes-, el promedio de la participación nacional fue de 64.14% de los ciudadanos con derecho a votar. Un registro mayor que en 2006 cuando el 58.55% de los empadronados fueron a las casillas.

Hace seis años, Tabasco se ubicó entre los estados con mayor votación. Yucatán ocupó el primer lugar con 77.4%, le siguió Tabasco con 71.2% y Chiapas con 67.32%. Puede anticiparse que este año Tabasco estará entre los de menor abstencionismo debido al interés que despertaron las campañas estatales y federales. Otras entidades que deben reflejar una alta participación son aquellas donde se votará por gobernador: Veracruz, Puebla, Guanajuato, Jalisco y Ciudad de México, al igual que en esta entidad y en Chiapas y Yucatán.    

Por supuesto que la contienda por la Presidencia también ha generado una importante expectativa. La complejidad de la contienda –con coaliciones, alianzas totales y parciales, candidaturas comunes y sin partido- pondrá a prueba a las autoridades. Los partidos y candidatos deberán contribuir a evitar una mayor confusión en el anuncio de los resultados. Habrá, como usted sabe, resultados preliminares y un sistema de conteo rápido para tratar de tranquilizar los ánimos. Los resultados oficiales se comenzarán a formalizar el miércoles 4 de julio.

DE TODOS COLORES Y SABORES

EN JUNIO de 2006 referí en estas páginas una “tipología del voto” en México. Eran los tiempos en los que las intensas campañas pusieron en boga el debate sobre “el voto del miedo”. Se añadía ese concepto otros ya ampliamente conocidos como: el voto duro, que tanto presumieron los partidos hasta llegar ahora al voto compartido, por sus más diversas alianzas y asociaciones. Este sufragio “duro” podría tener dos características: el ideológico, de los convencidos, y el de conveniencia, el controlado.

Posteriormente un grupo de activistas promovieron el “voto nulo”, como una forma de protesta. Sobre todo en el 2009. Pero este tipo de acción resultó no tener efectos legales; de todas formas, el voto nulo podría darse de manera intencionada o por error. En este 2018, se teme que crezcan las anulaciones por la complejidad de las coaliciones, pero también por la renuncia de candidatos, como es el caso Margarita Zavala (independiente), quien estará en las boletas pero ya no cuenta.

Hemos podido clasificar unas 15 expresiones del voto –corporativo, verde, coaccionado, etcétera-, pero para las elecciones del domingo casi todos los partidos y candidatos buscaron en la recta final de las campañas acudir al “voto útil”, que fue definido como la decisión de sufragar por el candidato que –de acuerdo a los intereses y convicciones del ciudadano- tuviera más posibilidades de ganar.

Se habló también del “voto indignado”, pero en fechas recientes fue difundida una categoría retomada por Juan Ramón de la Fuente en su libro “la sociedad dolida. El malestar ciudadano”. El ex rector de la UNAM se refirió al “voto terapéutico”, en el sentido de que ante “ese estado de dolor y malestar” que vive la población, había que ser más participativos, canalizar el enojo o la preocupación de manera constructiva: ir a las urnas.

AL MARGEN

DESIGUALDAD y violencia son los temas principales en la agenda nacional. También en la estatal. El jueves, un grupo de 170 organizaciones, académicos y activistas, presentaron en la capital del país la “Agenda de Seguridad y Justicia México 18-24”. Encabezados por el empresario Alejandro Martí entre otras cuestiones plantean crear el Consejo de Seguridad y Justicia del estado Mexicano. También hacen un llamado “a la concordia y reconciliación”.

MUY ADELANTADA está la lucha por la dirigencia en el Partido Acción Nacional (PAN). Como le mencionamos en la anterior colaboración, siete de doce gobernadores llegados al poder bajo las siglas del PAN anunciaron la integración de una Asamblea de Gobernadores de Acción Nacional. Esto fue calificado ya por una de las corrientes internas del panismo como un intento de buscar controlar “a la mala” es partido apenas pasadas las elecciones.

No hay sorpresas. A partir de la semana próxima todos los partidos entrarán en una fase de reestructuración, reagrupamiento y algunos quizá de desaparición, como sucedió después de los comicios del 2000. Ahora mismo, la mayoría de los partidos carecen de registro estatal y sólo sobreviven con la inscripción nacional. (vmsamano@hotmail.com)