Villahermosa se viste de fiesta

La naturaleza, tan puntual como siempre, comienza hacer de las suyas en Villahermosa y sus alrededores

La naturaleza, tan puntual como siempre, comienza hacer de las suyas en Villahermosa y sus alrededores. En estos días con el cambio de la temperatura fresca y relajante, al cálido ambienten natural de nuestra tierra, nos anuncia la llegada de la primavera, ¡vaya de qué manera lo hace!, obsequiándonos un espectacular paisaje urbano, único y suigéneris que se puede apreciar en calles, avenidas, parque, patios, alrededores de la ciudad y el campo, los tapetes de pétalos rosa o de un tibio lila a los pies de los árboles copados de flores, cautivan la mirada de quienes se dan con estos en cualesquiera de los sentido que transite.

El macuilí rosa, es una especie de roble que se ha adaptado espléndidamente al clima tropical tabasqueño. Año con año nos regala uno de los más bellos espectáculo que la naturaleza ha dado a sus hijos; inspira, transmite sensaciones sublimes al hombre que escribe, al que captura sus momentos o artísticamente le da más que un impulso para plasmarlo en un lienzo, donde un simple  vehículo barnizado de pétalos rodeado por un tapiz de corolas, son más que mejor para inmortalizarlo. Y para muestra hay obras de importantes personajes tabasqueños que nos lo han dejado como indeleble huella de su trabajo, o qué me dicen de Chacato Zúñiga, Hermilio Granados o del Dr. Miguel Ángel Gómez Ventura, entre muchos más.   

No dudo por nada del mundo que el compositor tabasqueño Manuel Pérez Merino traía en su inconsciente grabado uno de estos bellos momentos, cuando escribió “Villahermosa te vistió de fiesta la naturaleza”. Esta frase trae a mi mente una persona que ama su tierra, su agua y su gente, la alcaldesa del Centro Yolanda Osuna Huerta, quien es una impulsora de la cultura y que por estos días andará ocupada en el Segundo “Festival del Guayacán & Macuilí”, sin descuidar sus otras responsabilidades.

Este personaje, no es como los pajarracos de temporada o “políticos” de papel mediático que buscan las mejores ramas para hacerse notar, desde donde saltar para otra rama, abandonar un compromiso para colgarse de otro; no es de los que ocupan un cargo público para disponer y ya cuando están fuera, entonces si ¡remoler!, digo proponer, disculpe usted. No es de los que colocan macetas en los pasillos pensando en que así podrán ser perpetuados.

Hasta hoy en día, no recuerdo a un presidente municipal que se haya atrevido a emplear una frase para acompañarlo en sus años de gestión, con las palabras honestidad y resultados. Será porque estarían pensando en qué llevarse, o en qué obra faraónica emplear mayores recursos para de ahí jalar en la siguiente contienda.    

Aprovecho la ocasión para mandarle mi reconocimiento a la edil, por la tenaz labor de hacer transitable la ciudad, ya había sido seriamente descuidada; cualquier ingenuo se atrevería pensar que también la mandó adornar con flores, pero no es para tanto. Tiene un serio enemigo que es el tiempo y el presupuesto. Proponer remodelaciones y hacerlo responsablemente es plausible, porque el parque de los “Guacamayos” quedará como una auténtica obra urbana; ni qué decir del malecón –que aunque es obra federal ahora se inscribe en el proyecto de una bella ciudad-, y como dijo mi abuelito, yo tengo otros datos. No se olviden disfrutar de la ciudad, porque después viene el festival.