Una creciente violencia de género y las políticas públicas

En un análisis del cuarto informe del Presidente Andrés Manuel López Obrador

En un  análisis del cuarto  informe del Presidente Andrés Manuel López Obrador,  la periodista de CIMACNOTICIAS, Berenice Chavarría Tenorio, sostiene que en los 58 minutos que duró su discurso,  olvidó a las mujeres a pesar de que en México viven más de 66 millones de mexicanas  y que en el país hay una creciente ola de violencia de género.

  La periodista de la agencia de noticias de la organización feminista Comunicación e Información de la Mujer A.C. (CIMAC) afirma que el Presidente solo se refirió en dos ocasiones al género femenino, cuando habló de los apoyos a para niñas y niños con discapacidad  y a las maestras y maestros.

 “Así demostró lo que por cuatro años ha invisibilizado”, destacó la periodista

  Olvidó, afirma, los recortes a programas de salud, recursos tardíos para los refugios que ayudan a mujeres víctimas de violencia y un creciente número de desapariciones de mujeres y casos de feminicidio, el actual panorama que enfrenta México, en donde  se ha colocado en segundo lugar a las niñas, mujeres y adolescentes.

  El Presidente López Obrador aseguró que se ha mantenido la paz, pero, de acuerdo  con datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, junio del 2022 ha sido el mes más violento para las mujeres en los últimos siete años.

  Según el Secretariado, junio alcanzó una cifra histórica al registrar un total de 368 asesinatos de mujeres: 281 clasificados como homicidios dolosos y 87 como feminicidios, cifra que no se había visto en los últimos siete años, escribió Berenice Chavarría  en La Voceadora.

  El dato más alto registrado anteriormente corresponde al mes de agosto de 2021, con 271 homicidios dolosos de mujeres, asegura.

   En abril de 2022, el Presidente responsabilizó a la “pérdida de valores” el incremento de la violencia feminicida, pero en realidad es el clima de inseguridad para las mujeres que genera la impunidad que impera en muchos de los casos y mantiene a las víctimas lejos de la justicia y envía un mensaje de permisividad a los agresores amparados en un sistema misógino.

 Sostiene Chavarria Tenorio que el gobierno federal tampoco se ha preocupado por prevenir los feminicidios, pues las lesiones a mujeres y las tentativas de feminicidio siguen sin investigarse diligentemente.

 Además, los proyectos de vida de las sobrevivientes, afirma,, son ignorados y se proyecta  en la tardía entrega de recursos a los refugios que ayudan a mujeres víctimas de violencia.

 Así lo ha denunciado en constantes ocasiones la Red Nacional de Refugios (RNR),pues a más de ocho meses del ejercicio fiscal 2022, los recursos caían a cuentagotas a los espacios que brindan atención integral a las víctimas muchos de los cuales estuvieron a punto de cerrar.

  En su cuarto informe, el primer mandatario mencionó que trabaja para garantizar el acceso a la salud de manera universal, pero que en su administración se ha reducido el presupuesto a programas destinados a mujeres.

  En julio pasado, destaca, el Comité Nacional Feminista por la Salud Sexual y Reproductiva acusó al Gobierno de México por reducir el presupuesto en materia de salud, al descuidar la salud materna y perinatal; el aborto seguro; la  violencia de género y sexual; salud sexual y reproductiva para adolescentes; la planificación familiar y anticoncepción y por último el cáncer.

   Por otro lado, la organización Simetría México exhibió que el programa de salud materna, sexual y reproductiva gastó 38 por ciento por debajo de su meta para el segundo trimestre del 2022; esto se traduce en 473 millones de pesos que no se utilizaron y podrían traer consigo repercusiones negativas en los servicios estatales de salud que terminarían por afectar a las usuarias y pacientes.

  Estos datos son apenas un esbozo del panorama que tiene a las mujeres en segundo lugar y luchando por sus derechos. Y es que, aun cuando el Presidente  aseguró una reducción en las protestas, son las mujeres las que continúan resistiendo ante un Estado que no sólo las ha ignorado por 58 minutos, sino durante cuatro años, agrega Chavarría Tenorio. Y diríamos que la indiferencia frente a las necesidades y exigencias de la mujer no es de ahora sino que ocurría también en el viejo sistema.