Vuelta Continua

Cuando los árboles son indispensables

José Martínez

La reforestación es clave en la estrategia contra el cambio climático. México entrará a la vanguardia de los países que encabezan esa lucha a través de la política del presidente electo Andrés Manuel López Obrador de plantar árboles en un millón de hectáreas y cuidarlas para proteger al ambiente, recuperar el campo y generar empleos.

Referentes existen en nuestro continente. El caso más importante es el de Costa Rica, el único país centroamericano que ha conseguido incrementar sus bosques tropicales en el último siglo, con un esfuerzo tal que le ha valido el reconocimiento de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

Han conseguido financiamiento desde 1997 para pagar en las comunidades lo que se conoce como servicios ambientales, es decir, los beneficios que como sociedad se obtienen a partir de la vegetación: prevención de inundaciones, desgajamientos, evitar la erosión que obstaculiza la captación de agua, por no hablar del patrimonio cultural que representa la fauna y la flora de cada región. Servicios en los que se finca la supervivencia a futuro de la humanidad.

Para el caso mexicano, esta política pública considerada como uno de los programas estrella, estará a cargo de la hoy Secretaría de Desarrollo Social, que pasará a llamarse Secretaría de Bienestar, de la cual será titular María Luisa Albores y Javier May Rodríguez, subsecretario con la responsabilidad directa de su implementación.

Las metas son ambiciosas: 200 mil árboles en el primer año, 200 mil en el segundo, y la creación de 400 mil empleos permanentes en las zonas más pobres de 16 entidades, especialmente las del sur. Descentralizada en Oaxaca, la Secretaría de Bienestar impulsará la siembra y cuidado de caoba, cedro y hule, que en el trópico se dan bien y producen sombra aprovechable para la producción de cacao, así como otros cultivos.

Además del empleo, uno de los beneficios a mediano plazo será incrementar la seguridad alimentaria de estas poblaciones al producir para el consumo local, lo que posteriormente podrá verse reflejado en un fortalecimiento del mercado interno. Eventualmente, a largo plazo, si todo va bien con el impulso a la agroindustria, que será la vocación de la Zona Económica Especial de Tabasco, podríamos exportar al mundo productos sustentables de alta calidad.

Este sueño ambicioso de un futuro verde, rico, altamente productivo y sustentable requerirá fuertes medidas para que sobreviva como política pública más allá del 2024. Desde el punto de vista jurídico, es primordial que se evite el cambio de uso de suelo en el futuro, a pesar de las fuertes presiones económicas que se  pueden enfrentar, incluso una vez que la tierra esté produciendo.

El cambio más difícil, sin embargo, es el de tipo cultural, pues se requieren cambios en las prácticas del sector agrícola, especialmente abandonar el monocultivo y volver a practicar la milpa como la entendían los mesoamericanos: un microsistema flexible de producción, respetuoso con los bosques y selvas, así como con la fauna local.

La reforestación, más que plantar arbolitos o emplear a población vulnerable, puede ser la oportunidad de redefinir una identidad nacional más apegada a la tierra hacia una economía en la que quepan la actividad turística y la producción industrial de consumibles, pero con una sustentabilidad cimentada en un profundo respeto por la vida. Con diálogo e intercambio de conocimientos, es posible sembrar un futuro tan vasto como las riquezas culturales y productivas que existen en nuestro México.

PRIMERA PARADA

Los maestros tabasqueños establecieron un encuentro con el equipo de transición del presidente electo de México, Andrés Manuel López Obrador. Insisten en la cancelación de la Reforma Educativa, la reintegración de docentes cesados y el replanteamiento del modelo de estudios. En presencia del gobernador del estado, Arturo Núñez, el futuro secretario de Educación, Esteban Moctezuma y el titular de Educación en Tabasco, Ángel Solís Carballo, se realizó el foro de consulta en la entidad.

SEGUNDA PARADA

“No puede haber educación pobre para los sectores pobres, tiene que ser una buena educación, con buena infraestructura y con inclusión a las personas con discapacidades”, sostuvo Esteban Moctezuma Barragán, durante su visita a Tabasco.

PARADA ESPECIAL

La transición ordenada, sin sobresaltos, pretende ser afectada por intereses ajenos a la mayoría. Se ha visto a nivel nacional con las agresiones a universitarios; no extrañe que algo similar se intente orquestar localmente. Hay que estar atentos.