Piden mayor seguridad bodegueros de la Central de Abastos de Villahermosa

Tan sólo en el 2019, la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) envió a un total de seis agentes, quienes son los encargados de resguardar las instalaciones del inmueble sobre todo en el acceso principal y sus alrededores.

Aunado a esto, la propia Central de Abastos tiene un total de seis elementos de seguridad privada, quienes son distribuidos en dos turnos, pero ellos solamente se encargan de hacer presencia y tratar de solucionar situaciones de riesgo al interior del inmueble.

UN HERIDO ESTE AÑO

Entrevistado sobre las medidas de seguridad, el administrador de la Central de Abasto de Villahermosa, Arturo Roger Sánchez Sánchez, señaló que al interior del inmueble si se han suscitado hechos delictivos de manera ocasional.

“Desde que yo asumí el cargo de administrador de la Central de Abastos, les puedo indicar que ha ocurrió un solo incidente delictivo en lo que va de este año”, apuntó.

En este sentido, reconoció que sí tuvieron un problema muy grande con un individuo que fue entregado en varias ocasiones a la autoridad policial por haber lesionado con un arma punzo cortante a los vigilantes, “uno de ellos tuvo que ser incapacitado debido a las heridas profundas que presenta”, indicó.

En un recorrido llevado a cabo por Diario Presente en estas instalaciones se puede apreciar el ir y venir de las unidades motrices, entregan o se llevan los productos que ahí se ofertan. La mayoría de estos productos son insumos de primera necesidad.

“Muchos de los alijadores son muy groseros y hasta parecen algunos haber fumado marihuana, eso es una de las cosas que deben de regular”, señaló María Pérez, quien acude, a comprar en compañía de sus hijos, para abastecer su tienda de abarrotes.

Sobre este tema, coinciden en sus declaraciones algunos locatarios, quienes solicitaron a las autoridades de la SSPC que refuercen la vigilancia.

Dijo que los asaltos a transeúnte son constantes, especialmente por donde es necesario cruzar, en caso de que las personas que acuden no cuenten con vehículo.