La economía y las finanzas como el trasfondo de disputas políticas (III)

Toda la economía paga más por menos, y el sector exportador percibe más por menos.

Tercera Parte: La Tragedia Autoinfligida

Nota del editor: En una primera entrega, publicada en PRESENTE el lunes 15 de abril, el autor refiere los elementos socioeconómicos básicos del modelo vigente en la actual administración federal en México; una segunda parte, publicada el martes 16 del mismo mes explora las bases del segundo modelo socioeconómico aplicado en la  Argentina de Javier Milei. Ofrecemos las conclusiones sobre los factores de la estabilidad económica.

Como lo señalé en el texto anterior, hay factores que hicieron imposible que Argentina cumpliera con las obligaciones de su deuda (por novena vez), lo que provocó una ruptura con el capital mundial, y un gran incentivo la fuga de capitales del país.

¿Cuál es el saldo de toda esta devaluación? Igual que en el caso mexicano, cuando devaluaba constantemente: no bueno. De hecho, es bastante peor. Si vamos a las estadísticas históricas compiladas por el gran historiador y economista Angus Maddison, en términos de la Paridad del Poder Adquisitivo, para comparar diversos países con una misma vara, Argentina aparece en el lugar 15 de países con mayor PIB por primera vez en 1910. Por su poca población relativa, su Nivel de Vida era entre los mejores del mundo. Se fue avanzando hasta llegar al sitio 12 en PIB en 1950, retrocede un lugar cada decenio hasta 1980, y luego se desvanece del grupo de países con mayor PIB.

Es decir, cuando contaba con una cierta estabilidad monetaria, Argentina iba avanzando; mientras que una vez que comenzó a devaluar su moneda en forma errática y astronómica, perdió la posición ya obtenida por su prudencia financiera anterior.

¿Y México? Logra el lugar 15 en 1900, pero pierde ese sitio en el medio siglo siguiente, o sea su PIB es menor que el de Argentina en toda la primera mitad del Siglo XX. Pero, en la segunda mitad de ese siglo, México rebasa a Argentina y se mantiene hasta el ultimo año de trabajo de Maddison (2010) en el sitio 12. Ver https://en.wikipedia.org/wiki/Angus_Maddison_statistics_of_the_ten_largest_economies_by_GDP_(PPP)

¿Y actualmente? México tiene un PIB valorado en 1.5 billones de dólares, mientras que el PIB de Argentina no alcanza la mitad de ese monto. Por este resultado, que, desde luego, podría haber sido mucho mejor con una buena dosis de responsabilidad financiera en los tiempos de hiperinflación y de hiper devaluaciones, tanto México como Argentina podrían haberse posicionado mucho mejor en el Mundo de hoy día. Otros tenían menores recursos físicos, pero sacaron la fuerza interna para superar sus carencias exteriores. Ahí está el ejemplo de muchos países europeos y asiáticos.

LA IMPORTANCIA DE UNA MONEDA ESTABLE

¿Cuáles son los mecanismos creados por esas devaluaciones para hundir la economía de un país?

En primer lugar, una devaluación transfiere recursos (Ingresos, Inversiones, Mejor Fuerza Laboral, Tecnología, etc.) de la economía nacional a un sector pequeño exportador. Toda la economía paga más por menos, y el sector exportador percibe más por menos. Esta gran redistribución del poder económico nacional provoca enfrentamientos entre todos: entre el sector favorecido y el resto; entre el sector especulador de la próxima devaluación y el resto trabajador; entre el capital y el trabajo, especialmente de los sectores no favorecidos, ya que hay menos lugar para ser flexible en las negociaciones de sueldos y salarios; entre el gobierno y los empresarios no favorecidos; entre el gobierno y los trabajadores propios y de todo el país, ya que el gobierno desea reponer su poder adquisitivo mediante nuevos impuestos lógicamente resistidos por los trabajadores. En general se conduce una devaluación hacia una crisis de confianza en el gobierno, no inmediatamente, pero cuando las facturas de la devaluación se presentan.

Desde luego, una serie de devaluaciones crearía una psicosis de la población y nadie va a querer poseer su propia moneda por un instante, ya que valdría menos en el instante siguiente. Por ello, se exagera la tasa de circulación de la moneda, y se deprime la tasa de ahorro. Estas desventajas evidentes impiden un flujo normal de bienes y servicios, todo supeditado a la reciente devaluación o a la próxima que tal vez ocurra o tal vez no. Pero la incertidumbre es la tía de la inacción. Nadie se mueve hasta que el miedo provoca el siguiente pánico. Y la tragedia consiste en que los más favorecidos tienen el capital para provocar (o peor exigir al gobierno) una nueva devaluación que perjudicaría de nuevo al resto de la población, En el caso de Argentina ya empobrecida progresivamente por la política devaluatoria.

Por lo tanto, es importante contar con una moneda estable, moviéndose poco, aun en el largo plazo. Este objetivo ha sido logrado por el gobierno de López Obrador. El mismo objetivo fue desechado por el Gobierno de Argentina, prefiriendo devaluar otra vez su moneda que trabajar a la economía nacional y moverla hacia la estabilidad y la sustentabilidad. El futuro es impredecible, pero el pasado podría ser analizado, cosa que hemos tratado de hacer en el presente escrito, para esclarecer las consecuencias de una política socioeconómica y la otra, proveniente de dos modelos opuestos políticamente. FIN. ( El autor es Doctor en Economía, especialista en planeación y finanzas, colaborador de PRESENTE)