La suciedad en la cocina y los residuos de comida en las ollas pueden ser molestos, por lo que aquí te daremos 7 tips para eliminarlos. Toma nota.
1. Mezcla cáscaras de papa con vinagre
Para limpiar tus ollas y eliminar los restos de comida pegadas en ellas, corta cascaras de papa y colócalas en el fondo de la olla con un poco de vinagre. Deja actuar esta mezcla toda la noche y al día siguiente lava con el jabón o producto líquido que acostumbres. Eliminarás por completo todos los residuos pegados.
2. Usa toallas de papel
Las toallas de papel son de mucha ayuda en la cocina, y si tienes ollas fabricadas con teflón entonces serán la mejor herramienta con las que limpiarlas. Mójalas con un poco de jabón y agua tibia que no las humedezca por completo y frota la zona en que la comida esté pegada durante 5 o 10 minutos. Después lava tu olla como acostumbras y notarás que todos los residuos quedan eliminados por completo.
3. Emplea vinagre blanco
Gracias a las propiedades del vinagre blanco, este producto resulta un aliado ideal para la limpieza del hogar y para desinfectar ollas de acero inoxidable y cacerolas. Lo único que deberás hacer para limpiar es agregar un poco de vinagre a la olla y ponerlo a hervir. Pasando el tiempo retiralo con una toalla de papel y frota el resto con una esponja. Repite el procedimiento donde haya comida pegada.
4. Mezcla limón y jabón
El limón corta la grasa de forma excelente, por lo que mezclar su jugo con un poco de jabón y dejar remojar la cáscara en agua tibia te supondrá una excelente forma de lavar tus ollas y evitar la comida pegada en ellas. También puedes cortar tu limón en varias rodajas, mezclarlo con agua en la olla que vayas a limpiar y ponerlo a hervir durante 5 minutos. Deja reposar la mezcla y después lava como de costumbre. Te sorprenderán los resultados.
5. Usa la piel del jitomate
Para eliminar la grasa y los residuos de comida solo necesitarás agregar dos tazas de agua en una olla y ponerla a hervir junto a unas cuantas cáscaras, de 4 a 8 dependiendo la condición de tus trastos.
Después retira el agua una vez que esté fría y enjuaga tu olla con jabón desengrasante.
6. Añade bicarbonato de sodio a la limpieza
Espolvorea en primer lugar el fondo de tu olla con él y colocando después un poco de agua en este. Ahora pon a hervir la mezcla y después de que haga ebullición, cinco minutos aproximadamente, retira los residuos y enjuaga con agua y jabón.
Si la olla tiene espacios quemados, agrega 100 gramos de sodio por cada 3 litros de agua y déjalos hervir. Después repite todo el procedimiento.
7. Recurre al agua con sal de mar
Para limpiar tus ollas solo mezcla agua caliente con un poco de sal; dos cucharadas por cada litro de agua y dejarlo en “remojo” durante 15 minutos. Ya que este tiempo pase retira el exceso de agua y frota la zona sucia con una almohadilla de nailon o esponja. Usa tu productos de limpieza común y sorpréndete con la forma en que tus ollas vuelven a relucir.
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