Vergonzoso pase del Barcelona en Copa del Rey

No duró mucho más la alegría, hasta el gol de Antoine Griezmann en el minuto 72

El Barcelona tuvo un pase en extremo a octavos de final de la Copa del Rey, luego que sentenció su pase ante el UD Ibiza en tiempo añadido por marcador de 1-2.

El antiguo compañero de Quique Setién, Pablo Alfaro, en el Racing de Santander y con pasado fugaz como blaugrana, pusieron contra las cuerdas a los culés. Les dejaron el balón, pero lo anularon al tener contras constantes, llenas de peligro. Al Barça le bastó con dos golazos del 'Principito', a falta de Messi, que evitó que su equipo se ahogase en Can Misses.

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El UD Ibiza se adelantó pronto en el marcador, en el minuto 9, con un gol de cierta fortuna al rebotar el disparo de Javi Pérez en Pep Caballé y cambiar de trayectoria para engañar a Neto, que al borde del descanso sacó una mano izquierda vital para evitar el segundo de los locales, a tiro potente de Rodado, después de un remate al palo de Raí.

Además, los ibicencos vieron cómo se les anulaba un gol, en una decisión correcta al cometer falta Rodado sobre Clément Lenglet antes de encarar y superar a Neto. El meta brasileño del Barça sigue con su 'gafe' y no puede, todavía, dejar su portería intacta en los partidos que ha jugado.

El acierto del equipo de las Pitiusas, con un público festivo que lo daba todo en Can Misses, se sumó al mal partido del Barça para llegar con ese 1-0 al descanso. El Barça ni siquiera disparó a puerta en los primeros 45 minutos, pese a tener un once inicial bastante reconocible con Antoine Griezmann como jefe del ataque.

El inicio de la segunda parte siguió con el mismo guión, sin giro argumental alguno. Lo intentó Setién dando entrada a Jordi Alba, por un invisible Carles Pérez, y luego con Arthur, por un insípido esta vez Riqui Pugi. Mientras, en Can Misses, en el minuto 65, se veían más olas en la grada que en el cercano mar Mediterráneo.

No duró mucho más la alegría, hasta el gol de Antoine Griezmann en el minuto 72, cuatro minutos después de que Ivan Rakitic pusiera a prueba, por primera vez en el duelo, a Germán Parreño. Primero, remató de primeras un pase de Frenkie De Jong y, en el tanto del triunfo, hizo lo mismo a asistencia de Jordi Alba. En el minuto 95, a dos del tiempo añadido, hundiendo a un Ibiza que lo dio todo y fue premiado con una ovación cerrada de su gente.