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EL SOL DEL SURESTE



30/12/202209:00 a.m.Autor: José Demetrio PérezFuente: El Sol del Sureste
Otro año en construcción
Las obras del mercado público y el parque de beisbol, iniciados hace cuatro años por la Sedatu, seguirán “pendientes”

Cunduacán, Tabasco.- Un año más está por concluir, y es evidente que las autoridades de la Secretaría de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), dejarán nuevamente en “pendiente”, las obras que desde hace más de cuatro años vienen realizando en esta demarcación, consistente en un nuevo mercado público y el parque de beisbol.

OBRAS ESTANCADAS

Y es que, desde sus inicios, son decenas de irregularidades y denuncias que han enfrentado todos los proyectos que desde el pasado trienio inició la Sedatu en esta demarcación.

  • Donde inclusive el techo del nuevo mercado colapsó y los muros que sostienen estructura de fierro en el nuevo parque de beisbol, también sufrieron daños. Hay que señalar que, al respecto, el alcalde Abraham Cano declaró hace unos días que hasta el momento las autoridades de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, se han negado a responder por las múltiples irregularidades que enfrentan obras como el Centro de Convivencia Infantil y el parque central “José Eduardo de Cárdenas y Romero”.

Han transcurrido casi 365 días del año 2022, y es evidente que las autoridades de la Sedatu dejarán nuevamente pendiente para el 2023, la entrega de las obras del mercado público y el parque de beisbol. Ambos proyectos han sido cuestionados por la población de esta demarcación, por enfrentar deficiencias.

SIN FECHA DE ENTREGA

Juan Collado y Manuel Antonio González, habitantes de esta demarcación, comentaron que tanto la obra del nuevo mercado como la del parque de beisbol, ajustarán cuatro largos años de haberlas iniciado, y es el caso, que, hasta hoy, no hay fecha por parte de la Sedatu para sus entregas.

“Son obras que se han eternizado, y como están mal hechas, con el paso del tiempo van saliendo más y más deficiencias, como los encharcamientos, deterioro de ladrillos, hundimientos, y otros, que han requerido volver a destruir para hacerlo nuevamente, y eso es perdida de dinero y tiempo”, explicaron.

Agregaron que lo más triste para los habitantes de esta demarcación, es que el parque es solo una plancha de ladrillos, al que le robaron sus verdes árboles, y sobre todo las sillas en las que puedan sentarse las personas.


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