Cartas del Trópico

Democratizar al sindicato petrolero, en la agenda

Los trabajadores esperan la convocatoria y solicitan elegir a sus próximos secretarios generales, mediante el voto secreto    

La primera semana del mes de octubre, es el tiempo que establecen los estatutos internos del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) para que se publiquen las convocatorias donde se establezcan los tiempos de las elecciones para la renovación de los actuales secretarios generales seccionales en todo el país.

   

Coincidentemente, las fechas estatutarias que marca el arranque de las elecciones sindicales petroleras se inserta en el proceso de transición del Gobierno de la República iniciado en las elecciones constitucionales del uno de julio, y el triunfo del hoy Presidente Electo, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), principal promotor del relanzamiento de Petróleos Mexicanos (Pemex - Empresa Productiva del Estado), y la renovación democrática de las organizaciones sindicales de los trabajadores.  Como aquí se publicó en un atinado comentario: los sindicalizados son determinantes para un buen desempeño de Pemex y para ello se requiere una organización democrática, sin cacicazgos ni corrupción.

El relevo constitucional es una situación que se cruza en esta particular coyuntura de la transición, y que despierta el interés de los trabajadores sindicalizados de planta y transitorios de las secciones 14, 29, 44, 50 con sede en Tabasco, para que de acuerdo a los estatutos se publique la convocatoria y procedan a organizarse los aspirantes a sustituir a los actuales líderes en planillas electorales.        

De acuerdo a los tiempos, los secretarios generales en este momento son: Raúl Francisco Becerra de Dios, quien está al frente de la sección 14, de Ciudad Pemex, Macuspana desde hace ya más de una década; Eduardo Alain Rojas, de la sección 29, de Comalcalco; José del Pilar Córdova Hernández, de la sección 44, Centro; y Gustavo Guerra Espinosa, de la sección 50, con sede en Paraíso, Tabasco. Todos ellos han logrado reelegirse varias veces. Sus opositores sost8ienen que para ello recurrieron a métodos electivos poco transparentes.

PIDEN ELECCIONES LIMPIAS

Siguiendo las demandas de democratizar a las organizaciones sindicales del Presidente Electo AMLO, los trabajadores de planta de las secciones 14, 29 y 50, ya se organizan y pulsan la fuerza electoral de sus posibles gallos con el ánimo de presentar candidatos competitivos ante los arraigados liderazgos que mantienen el control sindical desde hace ya varios años, y que desde luego no será fácil arrebatarles el poder.

La sección 14 de Ciudad Pemex, es tal vez, la que más dinamismo observa, previo a las elecciones y en pleno periodo estatutario del lanzamiento de la convocatoria. Al menos en esta sección se maneja el nombre de Juan José Winzig Trinidad, con 15 años de antigüedad, que coincide plenamente con el proyecto de democratizar el sindicato, como parte de la estrategia de recuperar Pemex. También señalan a Nacho Flores y César León Díaz con liderazgos competitivos.

  

Lo mismo ocurre en los municipios de Paraíso y Comalcalco, donde los  opositores a los secretarios generales Gustavo Guerra y Eduardo Alain Rojas, son fuertemente cuestionados por sus compañeros, que no solo piden se publique la convocatoria, sino también quieren elecciones mediante el ejercicio del voto secreto y en plenas libertades electivas para los trabajadores.

En el reclamo de elecciones democráticas, mediante el voto universal y secreto, han tenido el apoyo de los liderazgos de Morena y de los senadores y diputados del nuevo partido gobernante.

La próxima titular de la Secretaría del Trabajo, Luisa María Alcalde ha sido muy clara: “Vamos a respetar la libertad y la autonomía de las organizaciones de los trabajadores, ellos deciden cómo, cuándo, se organizan. Cualquier sindicato va a tener la garantía de que el gobierno no va a ser persecutor ni tampoco cómplice de nada” (El Economista).

En diciembre pasado, Carlos Romero Deschamps se adelantó a las nuevas circunstancias y promovió su cuarta reelección. Pretende quedarse al frente del gremio hasta 2024. ¿Cometerá el error de querer imponer a sus incondicionales en el viejo estilo de plata o plomo? La ambición puede terminar por sepultar sus aspiraciones vitalicias.