Forja de buenos ciudadanos

Y el internet es una buena herramienta para adquirir conocimientos.

FUI JURADO EL VIERNES 24 en telesecundaria. No hubo muchos participantes, apenas cuatro de un total de trece posibles de una zona escolar. La escuela sede muy bien cuidada. Un espacio a la vista donde cualquier maestro quisiera trabajar. Un bello jardín de entrada. Y ese no se puede improvisar de una semana para otra.

EL TEMA FUE JUÁREZ. Y los cuatro discursos escritos muy bien. Hay tanto por decir del Benemérito, que nunca han de escapar los datos básicos de él, que hasta uno recuerda y aprende siempre algo nuevo. El ganador irá a la fase estatal. Por lo que el trabajo de preparación sigue. Los participantes, tres mujeres y un hombre. Como luz, como guía las palabras y obras de Juárez hoy en 2024. Para eso son los discursos sobre próceres. Para vincularlos con el hoy a manera de ejemplo y guía. Si no, son palabras huecas.

ME ES DE MUCHO AGRADO asistir a las escuelas. Recuerdo mis cuarenta años en educación, y buena parte de ellos en las aulas escolares tanto en primaria en el inicio como en telesecundaria, ubicadas estas específicamente en el medio rural. Hijos e hijas del campo los y las alumnas. De familias pobres la mayoría, y muy sencillas y nobles.

CONOZCO A MUCHOS maestros y maestras, así como asesores técnicos de zona y supervisores. Así que si voy a una telesecundaria más de uno me conoce. Y me tratan bien. Me gusta preguntar por saber si se mantiene la cantidad de alumnos, si disminuye, si van en aumento. Me gusta ver las actividades que realizan. Y siento nostalgia, claro. Pero me la aguanto. Y si hay oportunidad de decir unas palabras, dejo que mi corazón hable.

EL ALUMNO Y LAS ALUMNAS, excelentes en sus participaciones. Cada quien con su memoria prodigiosa, casi nueva para decir un discurso bien ensayado. Palabra a palabra, idea a idea. Buen enlace entre los párrafos. A los cuatro les faltó distinguir bien la parte final, que llamamos exordio, que es un llamado nuevamente y final al público para asegurar que llegue una especie de conclusión, y que es a la vez una invitación a retomar el ejemplo del prócer (en este caso): "Señores y señoras, compañeros estudiantes, les invito a..."

ESTABAN LOS PADRES de el y las concursantes. Estaban asimismo sus maestros y directores de sus escuelas. Expectantes, ansiosos a la espera del resultado luego que salimos a deliberar. La mayoría de los asistentes ven ganar a su favorita o favorito. Es natural. Para eso van. A ver ganar al propio, al o a la concursante de ellos. Y saben que solo habrá un ganador o una ganadora.

ENTRE 5 Y 7 MINUTOS el tiempo para hablar en tribuna ante una veintena de pares de ojos curiosos y ávidos de ver al y las participantes. Tres mujeres y un hombre. De edad aproximada de quince años. Bien plantados cada uno. Solo que una de ellas destacó por su buen uso de voz, por no gritar siempre, por matizar la voz y darle ritmo a lo sonoro. Además el manejo de sus manos se miraba de manera natural, dejando que se movieran instintivamente de acuerdo a lo que iba diciendo. Y por unanimidad ella obtuvo el primer lugar.

ES UN LUGAR COMÚN decir que todos son ganadores. Y hay que utilizar esa expresión, pero hay que justificarla. Porque no cualquiera participa. Porque no cualquiera pasa al frente. Porque no cualquiera siente esa necesidad de superarse, ser mejor no contra otros, sino superarse a sí mismo cada día. Luego viene la premiación solemne. Y unas palabras que me permití decir. A más que son palabras comunes igualmente (las que cualquiera dice). Y me centro que la oratoria no solo es para la política como muchos quisieran que sea propiedad de la política partidaria. Sino que debe ser aprendida por todos para mejor comunicarnos en lo individual y en lo colectivo.

SI LA MÚSICA Y CUALQUIER ACTIVIDAD artística no debe ser exclusiva su enseñanza para las élites, lo mismo el manejo y uso de la palabra al público. Esta debe estar  al alcance de todos. Cierto, hay que tener conciencia de ello, tanto maestros y padres de familia. No debemos permitir que se encajone a la oratoria y declamación solo para expertos y menos que sea exclusiva de los líderes.

ALGUNOS PARTICIPANTES PIERDEN puntos porque su discurso lo dicen en un mismo tono y volumen de voz desde el principio al fin. O bien bajito o bien alto el volumen, porque considera su mal asesor que así impresiona más. Yo les dije que si su maestro o maestra no sabe de oratoria, y si ni sus padres tampoco, entonces que busquen tutoriales en internet, específicamente en YouTube. La educación ha cambiado mucho. Y el internet es una buena herramienta para adquirir conocimientos.

POR ÚLTIMO. El objetivo de la educación y de los concursos, es que nuestros y nuestras estudiantes sean mejores hijos, mejores vecinos, mejores amigos,  mejores parejas y cuando sean grandes, sean mejores padres y mejores ciudadanos. De eso no hay duda alguna. Ah, y agradecido por la invitación a ser integrante del jurado.