Inseguridad y divisionismo en México

Especialistas en el tema de la inseguridad y el crimen organizado afirman que éstos, entre otras causas, son provocados en México por grupos e intereses económicos, externos e internos, a quienes conviene que nuestro país viva siempre postrado, dividido e inestable, con un miedo permanente y un gobierno ACORRALADO, que tenga muy poca capacidad de maniobra.

El doctor Adolfo Arrioja Vizcaíno Pérez, catedrático de la UNAM, doctor honoris causa por la Universidad de Newport, California. Conferencista invitado en la Barra de Abogados de Nueva York, conferencista en otras universidades como las de Estocolmo, Hungría y Praga, nos dice:

“Desde la concepción de la tesis de la gravitación política en 1819, así como de la Doctrina Monroe (América para los americanos) en 1823, Estados Unidos ha procurado mantener (siempre) a México en un permanente estado de inestabilidad política y de atraso económico.

Y uno de los mecanismos que los estadounidenses han usado para lograr ese estado de inestabilidad política y social es aprovechar y azuzar el divisionismo y odio que existe entre los mexicanos desde los tiempos coloniales. Esto es algo que ya hemos comentado aquí en otras ocasiones: fracturas y odios que vienen desde los días de la colonia, divisionismo que se agudizó a partir de los primeros días del siglo XIX, cuando aquel embajador gringo y maestro de la intriga, Joel R. Poinsett, contribuyó a agudizarlo. Y en nuestros días, esas fracturas persisten, nos siguen haciendo daño como Nación.

En aquella histórica entrevista que nuestro paisano de Balancán, el ilustre periodista Regino Hernández Llergo, hiciera al general Francisco Villa en junio de 1922 y, ante la amenaza en esos días de una posible invasión de los gringos a México, el Centauro del Norte afirmó:

“Es doloroso pensar, señores, declaró Villa, que sobre el poder de los gringos exista la DESUNIÖN de los mexicanos. Seríamos derrotados, señor. Apenas comenzada la guerra, habría además muchos traidores. Esos inconscientes, nos dice Villa, se venderían por un cuartillo de frijol…”. Al hablar de estos traidores, el general Villa me trajo a la mente a Felipe Calderón y a Margarita Zavala; a Ricardo Anaya o a Peña Nieto. Además Felipe Calderón y Margarita Zavala me recuerdan también a aquellos vende patrias del siglo XIX que fueron a Europa a buscar un emperador blanco, barbado y de ojos azules para que viniera a gobernar a los prietos y tontos mexicanos como a un servidor. Para estos antipatriotas, los más de treinta millones de mexicanos que votamos por Andrés Manuel en 2018 somos unos imbéciles.

En esa misma entrevista que don Regino realizara a Villa durante una semana en la Hacienda de Canutillo en Chihuahua, y a pregunta expresa de Emilia, asistente de don Regino Hernández Llergo, Francisco Villa respondió:

Es cierto, señorita, los mexicanos son muy valientes y muy sufridos, pero los gringos son muy poderosos, (y muy organizados). Sólo con la organización que ellos tienen, a la semana de comenzada la guerra, tendrían ya tomadas nuestras plazas…” (Y nosotros somos muy desunidos), termina diciendo Francisco Villa.

Por su parte el general Porfirio Díaz, viejo lobo de mar, que como militar vivió y enfrentó aquel fatídico siglo XIX lleno de divisionismos, de guerras civiles, de invasiones gringas y francesas, afirmaba:

“En Estados Unidos la democracia funciona porque, una vez que un presidente es electo, todos lo apoyan. En México, (por el contrario) todos se suman de inmediato para quitarlo”.

En nuestros comentarios de hoy, añadimos a esas palabras, que mientras los estadounidenses resuelven sus diferencias por la vía pacífica y por el mecanismo que ellos llaman democracia; una vez terminadas las elecciones, permiten trabajar al gobernante elegido y san se acabó: sea del Partido Republicano o el Demócrata. En México no es así, es todo lo contrario: más tardó nuestro paisano Andrés Manuel López Obrador en sentarse en la silla presidencial que ya los miembros de la ultraderecha empezaron a usar todos los medios para no dejarlo gobernar. Temerosa de que el paisano presidente destapara la podredumbre en que ellos convirtieron al país y les quitara sus privilegios derivados de la corrupción, la ultraderecha se ha dedicado a apedrearle la casa, a buscar la manera de no dejarlo gobernar.

Y esa ha sido nuestra historia de siempre: plagada de rebeliones, de guerras civiles, cuartelazos, magnicidios, asesinatos colectivos, zancadillas y traiciones, rumores y calumnias, dolos y envidias: sólo para buscar o preservar el poder y conservar los privilegios.

Y para muestra un botón: otra zancadilla surgió en la petroquímica que se está construyendo en Dos Bocas. Después de tres años de labores, los obreros que trabajan para la empresa ICA en la construcción de esa refinería decidieron hacer un paro supuestamente por demandas salariales y mejores condiciones de trabajo. Ni el más ingenuo cree que esas sean las verdaderas causas de ese movimiento. A nuestro amigo periodista de Puerto Ceiba, Lester Wilson, eso le parece sospechoso, sobre todo que se dé ese paro de labores en una de las obras insignes de la 4T.

Y se pregunta nuestro amigo Lester: ¿Quiénes están detrás de ese paro que al parecer es un intento de boicot a la 4T?, ¿Es este paro una estrategia de los enemigos de Andrés Manuel para boicotear los avances de los trabajos de la petroquímica? Suponemos que ese paro, puede ser otra de las tantas zancadillas que los agazapados amigos de la corrupción, gente de Romero de Champs, que se han movido en el lodazal desde hace años, le estén poniendo a la 4T.

Y mientras tanto, los gringos, que se ríen de nosotros, se soban las manos de manera ambiciosa y siguen diciendo:

-¡Déjenlos que se den en la torre, que se partan la eme, así están entretenidos y que se sigan debilitando.

Repito aquí las palabras que a principios del siglo XX dijera el presidente norteamericano Woodrow Wilson y que ya comenté en días pasados: Los mexicanos nacieron para obedecernos, para ser nuestros, “…les gusta ser nuestros sirvientes. Esperemos un poco, ellos mismos se matarán entre ellos, no saben […] vivir libres. Nacieron prietos y esclavos, nacieron nuestros”.

Vuelvo a insistir una vez más, que hoy que el gobierno de López Obrador está tratando de limpiar el cochinero en que los prianistas convirtieron al país, ¡URGE LA UNIDAD entre todos los tabasqueños y mexicanos, por el bien de Tabasco y de toda la Nación!