Fundada por Emilio Azcárraga Vidaurreta, la estación de radio XEW inició sus emisiones el 18 de septiembre de 1930 con una potencia de 5 mil watts, alcanzando cinco años después los 250 mil, lo que la convirtió en la estación de radio más potente del continente americano, o en voz de sus propios promotores: "La voz de América Latina desde México".

          En sus inicios esta emisora radial tuvo cuatro características: 1.- su cercanía con los agentes nazis asentados en México; 2.- su dependencia de la agencia alemana TRANSOCEAN para transmitir noticias sobre lo que sucedía en el mundo, principalmente en Europa; 3.- el monitoreo que de ella y de sus dueños, funcionarios y voces al aíre, mantuvieron los servicios de inteligencia de Estados Unidos alertados por la transmisión de información sesgada en favor de los nazis; y 4.- el monitoreo que de ella y de sus dueños, funcionarios y voces al aíre, mantuvieron los servicios secretos mexicanos alertados por la difusión de información sesgada en favor de los nazis, monitoreo que se vio reflejado en el informe entregado al presidente Lázaro Cárdenas en 1935 titulado "Los nazis en México" en el que se podían leer las siguientes líneas: "Antes de comenzar la guerra, toda la prensa independiente mexicana se encontraba al servicio del aparato nazi".

          Y este "aparato nazi" de difusión de hechos y de ideología, fue tan eficiente en este lado del mundo con la XEW y a partir del 31 de octubre de 1938 con el inicio de transmisiones de la XEQ (también emisora del grupo Azcárraga), que al historiador Juan Alberto Cedillo le permitió titular al Capítulo V de su libro "Los nazis en México", con un símil del eslogan de la XEW: "La voz de Goebbels para América Latina desde México".

          Esta actitud pro nazi de las emisoras propiedad de abuelo Azcárraga se vio interrumpida a principios de los años cuarenta cuando el gobierno de Estados Unidos a través de la Oficina de Coordinación de Asuntos Interamericanos encabezada por el multimillonario Nelson Rockefeller, amenazó con declarar a Emilio Azcárraga Vidaurreta persona non grata e incluir a sus empresas en la lista negra lo que traería como consecuencia el veto a la XEW y con ello le quitarían la posibilidad de adquirir las refacciones requeridas para su funcionamiento.

          No está de más decir que a partir de ese instante la orientación de las estaciones de radio propiedad del abuelo Azcárraga dio un giro de 180 grados: ahora la fuente de información eran las agencias de noticias estadounidenses y los nazis pasaron a ser el enemigo, y una vez terminada la segunda guerra mundial, a los nazis se le sumaron los soviéticos como enemigos del mundo occidental, democrático y libre, y entonces la llamada guerra fría hizo su arribo en las emisiones de radio, y con la llegada de la televisión, en las pantallas.

          El 8 de enero de 1973 se fundó TELEVISA de la mano de Emilio Azcárraga Milmo (conocido como "El tigre", hijo del fundador de la XEW), y la narrativa en radio y en televisión siguió siendo la marcada por las agencias noticiosas de Estados Unidos. Pero entonces hizo su arribo el 20 de enero de 2025 y ese día apareció Donald Trump como el hombre fuerte del gobierno de Estados Unidos, y con él llegó su política orientada en dos sentidos: 1.- su propia ideología fascista y su acercamiento al nazismo a través de la persona de su principal apoyo empresarial y económico, Elon Musk; y 2.- su amenaza permanente a los gobiernos y a los migrantes.

          Y en ese momento en México, Emilio Azcárraga Jean (descendiente de los fundadores de la XEW y de TELEVISA), hizo lo que no se atrevieron hacer ni su abuelo ni su papá: poner a disposición su empresa para que un gobierno extranjero amenazara a los mexicanos a través de anuncios propagandísticos.

          Y es que a decir verdad, el abuelo Azcárraga puso a disposición su empresa para que se difundieran noticias en favor de un gobierno extranjero en contra de otro gobierno extranjero, y el hijo Azcárraga puso a disposición su empresa para que un sistema extranjero atacara a otro sistema extranjero, pero el nieto Azcárraga puso a disposición su empresa para que un país extranjero atacara a los mexicanos. Así de simple.