Otra pobreza: el hombre y su relación con lo material

A pesar de ello, la mayoría nos encerramos, no damos margen a realizar otras cosas para alimentar el espíritu

Estamos pensando por un momento, por nuestros momentos. La vida es de prisa. Nos falta detenernos. Hacer ese alto para mirar, oler, sentir el aire…

Nos gana el tiempo. A pesar de ello, la mayoría nos encerramos, no damos margen a realizar otras cosas para alimentar el espíritu.

El hombre llega incluso a interesarse por el puro ser de las cosas, e ignora que existe algo, eso que significa ser, existir.

No es culpa de la pandemia. Sucedió mucho antes de que llegara el coronavirus. Nuestra relación con lo material existía. Nos arrojamos a ese camino sin mirar atrás, sin medir las consecuencias.

Es necesario marcar las diferencias. Entender qué es el humanismo. No se trata de dar monedas en cada esquina. Primero es entenderse uno mismo como persona. Vaciar lo que se presume como bueno, pero que se sabe no lo es, porque existe esa tendencia a la no claridad de nuestro ser.

Lo otro es la pobreza de mismo mundo. Por eso a veces no encontramos salidas. Nos topamos con actos inhumanos a cada momento. Incluso es lo que nos presentan algunos medios informativos. 

La venganza, las muertes, ejecuciones, accidentes donde no se presta ayuda al prójimo, violencia, migraciones, pobreza que termina en la desesperación hasta de quitarse la vida.

Aunque entendamos que pobreza vendría de no tener, de carecer, para la mayoría, lo material. Pero la pobreza del hombre va más allá, y nos lleva a ser humanos sin valor. 

Por esa razón cuando se observa que una persona presta ayuda a otra hay sorpresa. Nos llama la atención que un policía cruce la calle a un invidente o tienda la mano a un automovilista. Nos llama la atención tales acciones porque pareciera que fueran de este mundo.

Y es cierto que con la pandemia mucha gente perdió a sus seres queridos. Es cierto que con la inundación se fueron los enseres que tanto trabajo y sacrificio costaron, pero nos queda lo más importante, el poder vivir para empezar de nuevo, y demostrarnos que tenemos el humanismo con nosotros para salir adelante.

Tenemos que llevar a cabo acciones que nos identifiquen de manera positiva. No es sólo pensar sino actuar para que en realidad haya un cambio.

El Humanismo tiene como principal objeto el estudio del ser humano. Algunos críticos han hablado de este movimiento como una renovación de las letras, pero su importancia radica en el cambio de paradigma que comportó al situar al ser humano en el centro de todas las cosas, alejándose así de los postulados teocentristas de la Edad Media, para los que Dios era el núcleo central de la vida.

Un importante humanista de la época fue Tomás Moro quien escribió su obra fundamental “Utopía”, donde imagina en tono irónico un estado ideal, situado en una República imaginaria, con una organización comunitaria en la que los seres humanos viven con tranquilidad y docilidad.

Habría que adentrarse a su obra, pero también abrir la ventana para observar lo que sucede a nuestro alrededor, y empezar una convivencia con nosotros mismos.

PARÉNTESIS

Cuba informó que la vacuna contra el COVID-19, la primera desarrollada en Latinoamérica, está cerca de ser aprobada y ahora mismo se encuentra en ensayos clínicos de fase 3. En la actualidad se tienen cinco dosis candidatas que son la Soberana 01, Soberana 02, Soberana Plus, Abdala y Mambisa. Nuestro país también ha desarrollado su propio anti virus. Una muestra de la excelencia médica latinoamericana. (kundera_w@hotmail.com)