Todavía no termina octubre y sigue vigente el Discurso de la Presidenta Sheinbaum al cumplir su primer año como mandataria histórica de México, dicho en el Zócalo de la Ciudad de México. Escribí histórica, pues el adjetivo está justificado cuando recordamos que el voto político para las mujeres fue otorgado en 1953 por la reforma constitucional publicada el 17 de octubre de ese mismo año que reconoció el derecho de las mujeres a votar y ser votadas en todos los cargos políticos.

Las mujeres votaron por primera vez en elecciones federales el 3 de julio de 1953. Es decir, antes de esa fecha las mujeres como seres políticos ¡no existían! Eran en el sentido político, menores de edad...y padecían una larga serie de restricciones sociales y de todo tipo... hoy dirige el país una mujer. Una mujer estudiosa y activista social. Eso es evolución política.

Del discurso de la Presidenta Sheinbaum, -que escuché completo- me llamó la atención el inicio en  que advirtió con claridad que los enemigos de su gobierno fracasarán en su intento, cada vez más insistente y agresivo de separarla de AMLO. La vieja oligarquía que se formó durante el régimen nacido en 1929  y que continuó en la falsa transición del PAN, junto con el "Nuevo PRI de Peña Nieto" fue avasallada por el anterior gobierno de Morena, pero que en realidad, fue el gobierno de un caudillo civil y carismático de proporciones inéditas. Fue Andrés Manuel López Obrador el caudillo y líder que describió Max Weber en sus análisis en los años 20 del siglo pasado. Somos afortunados de haber visto tal fenómeno. Me amparo en el proverbio chino que dice: "Pide a los dioses que te concedan el privilegio de vivir en tiempos interesantes."

La oligarquía definida de forma sencilla, como: "Forma de gobierno en la cual el poder político y económico es ejercido por un grupo minoritario" todavía  está aturdida y confundida por los cambios en México y parecen creer que para la recuperación de sus privilegios es necesaria la ruptura entre la Presidenta y  su antecesor. La comentocracia de la Ciudad de México no conoce nuestro país y, vaya, ni siquiera conoce de verdad la gran y enorme Ciudad de México. No tienen credibilidad. Están desligados de la realidad, y la política no puede estar desligada de su materia prima. Es un tema que da para mucho.

La Presidenta Sheinbaum pidió a los mexicanos que recordemos cómo se vivía antes...Recuerdo mucho al PRI de JLP y del tibio M. de la Madrid, al de Salinas y al de Zedillo...luego el PRIAN y Peña. El PRI del desarrollo estabilizador fue un gran invento mexicano. Dio de sí o fue cancelado por el echeverriato. Es necesario decir ¡Cómo ha aguantado nuestro país! ¡Ha sido un saqueo e irresponsabilidad descomunales! El cambio de régimen que se llama a sí mismo 4T, que todavía está en proceso de construcción ya creó nuevos paradigmas pero falta mucho, mucho por hacer; vicios políticos de antaño siguen vigentes, muy vigentes y nuestra mentalidad está petrificada. Lo está porque abandonamos nuestro Sistema Educativo...y sin educación ni cultura ninguna persona, sociedad ni nación tienen un desarrollo real. A la gente común le molesta mucho escuchar lo anterior... le molesta porque es la estricta verdad y es visible como el sol al mediodía.

Habló la Presidenta en su discurso de varios temas y logros: la oscura noche del neoliberalismo, el poder al servicio de las comunidades marginadas,  la reducción de la pobreza, el humanismo de por "Por el bien de todos primero los pobres", que es una actitud que cuesta mucho trabajo comprender e interiorizar, etc.

También habló de la moneda y su estabilidad. Recuerdo, puberto, la devaluación de 1976...y todas las posteriores. Cito lo siguiente: "El súper peso ha sido una realidad durante el gobierno de López Obrador...no es una cosa menor si se considera que para los estudiosos del tema –por ejemplo, Enrique Feás, del derechista Real Instituto Elcano de España-, una moneda, es siempre, en última instancia, el reflejo de la confianza en el futuro del país emisor"

Los temas políticos y sociales de México y su gobierno actual son muchos; escribir sobre ellos con la intención de saber y aprender es fascinante.

De la Presidenta Sheinbaum me gusta su autenticidad y su sobriedad.

Su gobierno está en sus inicios. Podemos especular sobre el futuro pero no conocerlo. Solo los profetas se atrevieron a pronosticar el futuro. A nosotros nos toca esperar.