Videoescándalos: investigar a fondo, una sana instrucción

Vienen tiempos de duras batallas políticas y judiciales; pero también tiempos de mantener la calma. Quien se enoja, pierde, advierte el dicho popular

Vienen tiempos de duras batallas políticas y judiciales; pero también tiempos de mantener la calma. Quien se enoja, pierde, advierte el dicho popular. Pero también quien pierde, se enoja. La ira es mala consejera. Serenidad y paciencia, ha recomendado el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien parece tener en las manos la punta de una madeja que lo llevará a desenmarañar una extraordinaria red de complicidades.

Advirtió ayer que no cederá en su propósito de limpiar de corrupción a México. Desde un principio anunció que se dedicaría, como tarea central de gobierno, a “purificar la vida pública”.

Sostuvo: “Voy a mantener siempre mi autoridad moral para tener autoridad política , repito, desterrar la corrupción del país, que es el principal problema de México. (…) No vamos a dar ni un paso atrás en este propósito”.

Antes de que lo interrogaran al respecto, abordó por propia iniciativa el polémico tema de una videograbación que hizo circular el periodista Carlos Loret en el que se observa a Pío López Obrador, hermano del presidente y responsable durante un tiempo de las tareas de organización de Morena en Chiapas, recibir dinero del político y empresario David León Romero, también ex funcionario del gobierno de Manuel Velasco, en Choapas.

Aclaró que la citada grabación no está relacionada con la elección presidencial del 2018, sino con aportaciones que particulares hicieron al movimiento democrático y a la oposición en 2015. Pero señaló que actuará de manera congruente por lo que recomendó a León Romero no tomar protesta al frente de la nueva empresa de distribución de medicamentos como estaba previsto, “hasta que se esclarezca” su situación.

En este, como en otros casos, insistió, se tienen que presentar las denuncias correspondientes ante la Fiscalía General de la República. Los implicados tendrán que comparecer. 

Apuntó el Presidente en un discurso ya conocido y reiterado para que no se olvide: “Cero corrupción, cero impunidad; sea quien sea. Nada ha dañado más a México que la deshonestidad de los gobernantes. No debe haber impunidad para nadie. Si un familiar comete un delito, debe ser juzgado, sea mi hijo, mi esposa, mis hermanos, mis amigos. Se acabó la impunidad. Yo no le voy a fallar al pueblo de México”.

REACCIÓN DEFENSIVA

La difusión de la videograbación mencionada fue calificada por AMLO “como una reacción normal, legítima de quienes están viendo afectados sus intereses por la decisión que tenemos de acabar con la corrupción en el país”.

Explicó: “Como se están ventilando casos muy graves de corrupción, como es el caso del señor Lozoya, que ha implicado a expresidentes, a legisladores, a funcionarios públicos, y como también se está ventilando el caso del señor García Luna, que está siendo juzgado en Estados Unidos, acusado de haberse puesto al servicio del narcotráfico, de una banda de narcotraficantes siendo secretario de Seguridad Pública del gobierno federal, estos casos muy delicados, pues entonces nuestros adversarios buscan equiparar las cosas y decir: ‘Todos son lo mismo’. Esto es bastante usual, recurrente, cuando se está llevando a cabo una transformación. Eso se decía en las campañas: ‘Todo son lo mismo, todos son iguales’, pero no es así, no somos iguales”.

Vale el registro de lo que puntualizó el mandatario y fundador de Morena respecto al video en el que aparece su hermano y David León, quien al inicio de este gobierno fue designado director nacional de protección civil. Señaló el Presidente: “hay notorias diferencias con relación a los otros asuntos. No sólo es lo cuantitativo, no sólo es el monto del dinero, que no es comparable. Sólo una operación ilícita que está denunciando el señor (Emilio) Lozoya donde cobraron 200 millones de dólares de más en la venta de una planta chatarra, que esto qué puede significar dos millones de pesos. No sólo es eso, es el fin del hecho que se está ventilando”.

Argumentó: “En aquel caso, en aquellos casos, que los tiene muy molestos a nuestros adversarios, sin duda es extorsión, es ‘mordidas’ para obtener de manera ilícita recursos públicos, es corrupción. En el otro caso, en el de mi hermano con David León, son aportaciones para fortalecer el movimiento en momentos en que la gente era la que apoyaba básicamente. Nosotros hemos venido luchando durante muchos años y nos ha financiado el pueblo, como ha sucedido cuando se han llevado a cabo revoluciones”.

POSTDATA

Morena tiene que asumir los costos de su indecisión. Alargar los plazos para evitar el choque de intereses y grupos ha colocado en un callejón aparente de sin salida. Pero de esta situación pueden salir renovados. Habrá que ver.