Deplorables y deprimentes son las instalaciones del parque central “José Eduardo de Cárdenas y Romero”, ya que desde que terminó la cuarentena, las autoridades de este municipio ni siquiera se han preocupado por mandar a lavar una parte que se encuentra tapizada de heces de zanates.

Al respecto, ciudadanos opinaron que desde que ya no opera la taquería “Custodio”, en el kiosco ubicado enfrente de la parroquia de La Natividad de María, esa área se comenzó a volver sucia e insalubre.

Efectivamente, durante un recorrido efectuado por el kiosco se pudo notar el abandono y olvido que enfrenta esta área, ya que las bancas están tapizadas de heces de aves, y las aguas negras causan un apeste que origina que la gente no pueda ni siquiera acercarse al lugar.

Habitantes de esa localidad, manifestaron que el abandono de esa zona del parque se debe a que autoridades en su afán de “limpiar”, de ambulantes, provocaron el abandono y olvido en este espacio, al grado que los animales se han adueñado del lugar. 

 “Cuando estaban los Custodio a cargo del kiosco, estos mantenían limpia la zona, pero como se los quitaron y  le dieron este espacio para dárselos a las hermanas Díaz Orueta, éstas lo dejaron olvidado, porque no tienen la necesidad de trabajar, por eso, hoy esta parte del parque central simplemente apesta”, abundaron.

Hicieron un llamado a la Presidenta Municipal, Nidia Naranjo para que haga la limpieza de los espacios recreativos a los cunduacanenses, ya que por lo demás ha resultado ser un verdadero fraude.