AMLO y el optimismo: no nos ha ido tan mal

Tenemos un Presidente optimista y persistente. Aunque hay un estilo que a sus adversarios –y a algunos de sus simpatizantes- no gusta, pero el tabasqueño Andrés Manuel López Obrador hace lo que, en cualquier circunstancia tiene que hacer un líder: mostrar decisión y despertar el ánimo. Aunque la realidad sea complicada.

Y así llega a su segundo informe anual de labores. Vamos bien, pese a la crisis, sostiene. Tanto en lo que toca a la economía como al combate a la pandemia el mensaje es similar: la estrategia –en los dos casos- ha funcionado y no cambiará. Esto, es obvio, despierta aún más la incomodidad de sus críticos.

El Presidente está en lo suyo. Es un político habilidoso. Tenaz, obstinado, terco –lo dice él mismo-, perseverante.

Hoy dirá, seguramente, que pese a todo el país está bien. Se recuperarán los empleos y se honrará a nuestros muertos, estos ya con vidas irrecuperables. Pero hay que seguirá adelante, cuidando que no tengamos daños mayores.

Como muestra de que la estrategia del gobierno federal funciona los registros oficiales nos dicen que, precisamente en la semana del informe, casi todo el país ha salida de la emergencia de alto riesgo por el coronavirus de Wuhan: 10 estados fueron clasificados en color amarillo del semáforo epidemiológico (riesgo medio); 21 están en naranja (riesgo alto)  y únicamente Colima se encuentra en color rojo (riesgo máximo).

En Tabasco, que el registro federal califica en “riesgo medio” (amarillo), el gobernador Adán Augusto López determinó que hay que mantener en lo posible los mayores cuidados y por 15 días se actuará como si se tuviera “riesgo alto” (naranja”). Tiene razón: otros estados son ejemplo de la probabilidad de un retroceso si se aceleran las reaperturas.

La mesura está plenamente justificada. Tabasco estuvo en los primeros lugares de contagio y logró frenar la dispersión de la enfermedad. En el país los saldos son dramáticos: 600 mil contagios y más de 64 mil desde el inicio de la pandemia el 28 de febrero. Los cuidados deben mantenerse y en algunos casos extremarse.

LA OTRA EMERGENCIA

Pero tampoco hay que ignorar que entre la economía y la salud hay una dependencia insustituible: si hay salud hay economía y si hay economía hay salud. Lo entiende de esta forma el presidente López Obrador quien, me parece, buscó siempre que sus mensajes alimentaran el optimismo de los inversionistas, empleadores, trabajadores…a pesar de la disminución de los recursos. El tiempo devoraba lo poco que había.

Ayer AMLO adelantó lo que hoy dirá a los mexicanos: La estrategia para la recuperación económica ante la crisis que originó la epidemia de COVID-19 ha funcionado. Dijo: “Nos ha ido mejor en cuanto a la estrategia que se aplicó porque nos estamos recuperando, ese es un hecho. Se cumplió nuestro pronóstico de que íbamos a caer y nos íbamos a levantar, que iba a ser una V. Tenemos indicadores que demuestran que estamos saliendo de la crisis económica y estamos saliendo con costos bajos”.

Expuso el Presidente en lo que también es un compromiso de todos, una instrucción a sus colaboradores, una recomendación a los gobernadores y alcaldes: “Tenemos finanzas públicas sanas, no hay nada que temer; tenemos para lo fundamental. No va haber despido de trabajadores; no se va a reducir en términos reales el salario, no van a faltar los alimentos básicos, no va haber inflación. No se reducen, al contrario, se amplían los montos destinados a los pobres; no se detiene ninguna de estas obras prioritarias. Se cuenta ya con presupuesto y ya vamos saliendo…”

Esto lo detallará durante su segundo informe oficial. Las buenas cuentas se tienen que reflejar en la realidad: la sanitaria y la de la economía.

PRIMERA PARADA

A menos de que se retire de la contienda por la dirigencia de Morena, es un hecho que el futuro dirigente nacional será Mario Delgado Carrillo. Tiene un trabajo permanente de promoción, escogió la estrategia adecuada y le ganó el salto a los seguidores de doña Bertha Luján, quien inteligentemente anunció que no estará en la encuesta que realizará el Instituto Nacional Electoral. Se habló de que podría anotarse Alejandro Encinas, pero el actual subsecretario prefiere mantenerse fuera del pleito entre las corrientes morenistas.

SEGUNDA PARADA

Era cosa de tiempo que se hiciera efectiva la renuncia de Víctor Toledo como secretario de Medio Ambiente (Semarnat). No sólo era cosa sabida en el gabinete sus diferencias con el Jefe del Gabinete, Alfonso Romo, sino que él mismo las expuso en una grabación que se hizo pública hace como un mes. En lugar del ecologista llega la chiapaneca María Luisa Albores, de manera que resulta natural que a la titularidad de Bienestar ascienda Javier May, hombre de todas las confianzas del Presidente.

PARADA ESPECIAL

Nuevo llamado del gobernador Adán Augusto López y de la secretaria de Salud: estamos en semáforo naranja pero el virus sigue. De los empresarios depende también si seguimos adelante o nos regresamos. A cuidar todos los protocolos contra los contagios.