México y su modelo

Hemos hablado en estas páginas del atraso de los pueblos por estar sometidos a un modelo imperial y no democrático

Hemos hablado en estas páginas del atraso de los pueblos por estar sometidos a un modelo imperial y no democrático. Esta forma de organización, centralizada y autoritaria, limita al individuo y a la sociedad en todos los aspectos: la producción, la economía, la salud, la seguridad, la educación. Permítame comentarle sobre un tema que me parece fundamental: el de la educación.

La educación es un tema para toda la vida. Comienza en la familia, se consolida en la escuela, se afina mediante el trabajo, y se fortalece mediante la investigación y la experiencia. No comparto la idea de que alguien vaya a la escuela para educarse como individuo, ni que haya alguien quien te vaya a educar, que es la idea pasiva dominante de la educación en México. Es una idea pasiva, porque realmente es como si uno fuera al hospital para que alguien le ponga una inyección y ya. 

Yo no creo en instituciones pasivas y reactivas, aunque siempre nos hemos creado algunas de ese tipo para corregir los males de la sociedad, yo creo que la educción debe ser positiva y propositiva. Debe tener una postura corporal adelantada, pues debe de inspirar una actitud investigativa en los participantes que sean administradores, maestros, o alumnos, y el resto es la búsqueda de las mejores soluciones que pudiera haber a esos problemas. 

Por ejemplo, si tú piensas en problemas de la geografía y los quieres resolver, simplemente los quieres resolver porque hay un examen que hay que aprobar, pero no quieres entender la naturaleza de la formación de la tierra; no quieres entender que hay zonas de vientos extremos y estos pueblos se forman de una manera distinta, que hay una profunda impacto en cada molécula de la geografía sobre las criaturas,  incluyendo a los humanos. Entonces, yo creo que no se entenderá la geografía y será de poco uso cualquier conocimiento cuyo objetivo no es conocer más sino aprobar un examen. 

Ahora, si ves al continente americano, es casi cuatro veces de norte a sur que de este al oeste, mientras que África es casi parejo como un círculo con una parte faltante, y esa parte faltante está en América del Sur (Brasil básicamente); pero Asia y Europa conforman un solo continente, realmente la división geográfica por mar no existe, simplemente es una división arbitraria. Las montañas Urales, este espacio es enorme, básicamente va mucho más de este a oeste que de norte a sur. 

¿Pero qué tiene que ver eso con la geografía? 

Bueno, el gran geógrafo, viajero (estuvo en México)  e inventor Alejandro Von Humboldt, fue el descubridor del hecho de que el mundo es muy similar dentro de las mismas latitudes y más que nada las temperaturas que llamó isotermos. De hecho todos los “isos” de nuestro vocabulario vienen de la mente de ese extraordinario humano, esos isotermos que marcan una vegetación similar y se extienden en cinturones estrechos alrededor de todo el planeta según la distancia del ecuador (o de cualquier polo) y según la elevación. 

Von Humboldt elaboró un modelo de la vegetación similar en diferentes continentes en la forma de una maqueta enorme que llamó “Naturgemalde”, un término alemán que se traduce en algo como “pintura de la Naturaleza”, algo que capta la entereza e integralidad de la Naturaleza. 

Ahora bien, un espacio terrenal larguísimo otorga más espacio para el desarrollo de la vegetación preferida y de ahí las criaturas que dependen de la vegetación. En emergencias, como por ejemplo el estrés que puede ser de un clima extremo en una zona limitada, ellos tienen el espacio para moverse y entonces en base a estas ideas, geógrafos como Jared Diamond han establecido que en nuestro continente hubo un déficit de los animales que había en los continentes de Europa, incluso de África porque antes del Canal de Suez estaban conectados por tierra el continente africano con la masa asiática - europea. Hay otras razones como la facilidad de la caza para los humanos recién llegados a América. Así, Diamond en “The Third Chimpanzee”, Harper Perennial, Nueva York, 2006, p. 357, estima que:

“Entre la genera de mamíferos grandes, aproximadamente 73, 80 y 86 por ciento respectivamente se extinguieron in América del Norte, América del sur, y Australia al tiempo o después de la llegada de humanos.”

Para mí la conclusión de todo eso es que explican en gran parte la relativa falta de proteínas en el México precolonial. Algo que  mucho tiene que ver con nuestra forma de ser. (EL AUTOR ES DOCTORADO EN ECONOMÍA POR LA  UNIVERSIDAD DE PENNSYLVANIA, 1971. COLABORADOR DE DIARIO PRESENTE * Centro de Estudios e Investigación del Sureste AC)