OBSERVATORIO DE DATOS

A Tres Años de la Pandemia

Hace unos meses se cumplieron 3 años del primer caso de COVID-19, 17 de noviembre de 2019 en China; detonando en epidemia el 31 de diciembre, al propagarse masivamente dentro del propio país. 3 años desde el primer caso fuera de China, 13 de enero de 2020 en Tailandia; convirtiéndose  en pandemia el 31 de enero, al rebasar países y regiones. En México, a 3 años del primer contagio, un 27 de febrero, y del primer deceso por COVID-19 el 18 de marzo de 2020. Y exactamente 3 años de la Jornada Nacional de Sana Distancia, iniciando del 23 de marzo al 21 de abril, y extendiéndose hasta el 30 de mayo; decretándose medidas sanitarias, como uso de cubrebocas y distanciamiento social, para disminuir los contagios.

                                  

La frase utilizada “Quédate en casa”, data desde La Colonia, usada para protegerse de la peste, el tifus o la rabia, volviéndose a usar a partir de aquel marzo de 2020. A pesar de vivir casi dos meses en aislamiento, la realidad pandémica nos rebasó. Todo era confusión, incertidumbre y temor. El COVID-19 nos preocupaba mucho porque en México veíamos el colapso de los sistemas de salud en Europa y que no existía vacuna ni tratamiento para detener los contagios y la enfermedad. Ningún país, organización mundial o regional, por muy desarrollados o eficientes que fueran, estaban preparados para el impacto de esta pandemia.

En el planeta, 1 de cada 12 personas se ha infectado con saldo cercano a los 7 millones de decesos. El cubrebocas y las vacunas han evitado la muerte de 1 de cada 20, como sucedió con la gripe española en 1920, que cobró cerca de 100 millones de vidas. En México se han acumulado unos 7.5 millones de casos y más de 333 mil decesos. Según el CIPSS de la UNAM, la mayoría de los que han muerto por COVID-19 tenía entre 40 y 69 años. Más del 90% eran trabajadores, amas de casa y jubilados, quienes, aún confinados, siguieron usando el transporte y la vía pública para subsistir.

El trabajo a distancia es viable para personas de más altos ingresos, pero no para la mayoría de los trabajadores. Y de estos decesos, 2 de cada 3 (62%) tenían otras comorbilidades, como diabetes, hipertensión y obesidad. En el primer año de pandemia apenas 1 de cada 4 contagiados recibió atención hospitalaria (27%). Sólo 1 de cada 5 fallecidos recibió Cuidados Intensivos (19%) y se intubó a menos de 1 de cada 3 de los que murieron (29%), cuando este procedimiento debía aplicarse a la mayoría de los casos graves. La pandemia expuso al sector salud tal cual: un sistema precario e inoperante. Y después de 3 años, la situación es prácticamente la misma o hasta peor.

En septiembre de 2019, del Primer Informe de Gobierno se observaban 1.8 médicos y 2.5 enfermeras, en el sector público en contacto con paciente por cada 1,000 habitantes. Para septiembre de 2022, la cifra “creció” apenas a 1.9 y 2.6, respectivamente. Un aumento doblemente  irrisorio de 0.03 anual. El número de camas quedó exactamente igual, 0.7 por cada 1,000; mientras que el de unidades de consulta externa por cada 100,000 habitantes, pasó de 17.3 a 15.5; es decir, retrocedió 1.8. En 3 años, de igual a peor! Por otro lado, el INEGI reporta que 1 de cada 4 mexicanos (26.5%) no cuenta con afiliación a ningún tipo de servicio de salud.

Y aunque la mayoría (73.5%) está afiliada al servicio público, no se traduce en un acceso efectivo, pues la mitad de estos mismos derechohabientes (56%) recurren al sector privado, en virtud de las carencias del sector público. El presupuesto, el personal y la infraestructura de salud deben trascender las políticas públicas y las administraciones, con inversión y gasto creciente. No es posible que países de la región con economías mucho menores, como Costa Rica, Chile y Panamá nos superen en cobertura, capacidad y eficiencia ante la OMS. Mientras, hagamos lo posible por alimentarnos mejor, hacer actividad física, ser mesurados y prevenidos para minimizar riesgos y gravedad. Seamos una de las pocas estadísticas favorables de esta pandemia y de nuestro sistema de salud. ( drulin@datametrika.com/Investigador Titular, UJAT/Director General, Datametrika Co.)