Petróleo y democracia en Tabasco (I)

Tabasco fue uno de los laboratorios de ocurrencias del gobierno federal en el pasado

Tabasco fue uno de los laboratorios de ocurrencias del gobierno federal en el pasado. Destacando la implementación de lo que se conoce como el Plan Chontalpa establecido sobre lo que fueron miles de hectáreas de selva, para que posteriormente se hiciera la modificación del cauce del río Grijalva con la construcción de grandes presas hidroeléctricas sobre la parte alta de dicha cuenca, lo que modificó la geografía estatal.

Sin embargo, la actividad que verdaderamente movió a las comunidades en su contra, fue la actividad petrolera, que vio nacer a uno de los primeros movimientos por la defensa de los recursos naturales en México, el Pacto Ribereño. Éste aglutinó a miles campesinos inconformes por la forma en que se realizaba la actividad petrolera en Tabasco, que en sus primeras etapas llega como extensión de la actividad extractiva realizada en el sur de Veracruz y que entra a las comunidades tabasqueñas sin ningún respeto por las personas, sus pertenencias y menos por el ambiente. Eran los albores del neoliberalismo.

En una época en la que no existía una legislación ambiental, y con el argumento de que se estaba sacando la riqueza nacional, los trabajadores de la petrolera entraban a las comunidades sin que nadie pudiera decir nada, contaminando sitios de pesca y áreas de trabajos agrícolas. La respuesta gubernamental ante el descontento social fue con la represión, incluso con la participación del ejército, y la cooptación de los inconformes con recursos públicos.

El Pacto Ribereño se extendió por varios años culminando con una de las recomendaciones más importantes emitidas por la naciente Comisión Nacional de los Derechos Humanos: la recomendación número 100 que generó la creación de la Comisión Interinstitucional para la Atención de la Recomendación 100, la tristemente famosa CIAR-100, que fue la forma en que el gobierno priista de esa época sacó provecho de la desgracias ajenas.

Para atender la recomendación 100 se destinaron cientos de millones de pesos supuestamente para resarcir el daño causado en diversos municipios del estado de Tabasco. Algunos de estos dineros quedaron en los maletines de los responsables de remediar las zonas impactadas, sin que por ello se diera cumplimiento a la recomendación de forma íntegra.

Sobra mencionar que muchos de estos inconformes hallaron en el naciente movimiento del Partidos de la Revolución Democrática, encabezado por un joven Andrés Manuel López Obrador, un apoyo para su lucha, por lo que durante años la exigencia de un medio ambiente sano y democracia se fundieron y enfrentaron al poder en Tabasco.

A pesar de las reclamaciones ante la petrolera por los impactos causados en los grandes cuerpos lagunares del estado que decantaron en marchas y plantones en la capital tabasqueña y algunas otras en la capital del país. La respuesta institucional siempre fue la represión.

En su turno, Roberto Madrazo Pintado, creó la Base de Operaciones Mixtas, en la que participaban cuerpos policíacos del estado y el ejército para ahuyentar a los inconformes que bloqueaban acceso a pozos petroleros o vías de comunicación. Además de que creó una dependencia para recibir los recursos que PEMEX entregaba al gobierno del estado, la CIMADES.  (Continuará)