Tifón y Perro del Infierno, las Nuevas Variantes de COVID-19

Los virus mutan constantemente para sobrevivir y adaptarse a nuevas condiciones de salud

Los virus mutan constantemente para sobrevivir y adaptarse a nuevas condiciones de salud, de fármacos y de inmunidad en sus hospederos. Estas mutaciones no son tan importantes, pero en ocasiones el virus puede cambiar fortaleciendo su transmisibilidad o provocando efectos más graves. El SARS-CoV-2 ya es endémico, estará siempre entre nosotros, y la tendencia a desaparecer no significa que ya sea un problema menor. No. Los virus que causan pandemias suelen formar parte del ecosistema y la COVID-19 seguirá presente y cobrando vidas. Lo único que termina es una emergencia de salud pública. 

Desde inicios de la pandemia se han registrado diversas variantes de la cepa original, unas más peligrosas que otras. La primera se detectó en Reino Unido y se bautizó como Alfa (B.1.1.7), y de ahí surgieron Beta (B.1.351) en Sudáfrica, Gamma (P.1) en Brasil, Delta (B.1.617.2) en India, Épsilon (B1.427) en Estados Unidos, Zeta (P.2) en Brasil, Eta (B.1.52) en Reino Unido y Nigeria, Theta (P.3) en Filipinas, Iota (B.1.53) en Estados Unidos, Kappa (B.1.617.1) en India, Lambda (C.37) en Perú, Mu (B1.621) en Colombia... Y Ómicron (B.1.1.529 y BA.1-BA.5) en Sudáfrica, altamente contagiosa y la reinante actualmente, que cuenta con subvariantes de preocupación por su alta transmisibilidad, como los nuevo sublinajes BQ.1/BQ.1.1 y BA.5.6.2/BW.1. 

Más temidas por desconocimiento y bautizadas en redes sociales europeas como “Perro del infierno” o “Cerbero”, la mascota de Hades en el inframundo, un monstruo de tres o múltiples cabezas con cola de serpiente; y como “Tifón”, colosal y espeluznante monstruo alado de la mitología griega que, sin lograr destruirlo, derrotó a Zeus vengando a sus hermanos Titanes. 

Ninguna autoridad sanitaria, regional o global, las ha denominado de esa manera y tampoco generan una sintomatología particular que alarme sobremanera a los organismos de salud pública mundial. No se trata de una nueva variante como tal, pues en realidad son subvariantes de Ómicron, contra las cuales las vacunas aún siguen siendo efectivas, aunque no debemos olvidar que los nuevos linajes de ómicron han mostrado mayor dinámica de contagio y escape inmunitario importante, lo que explica el aumento acelerado de “Perro del Infierno” y los numero ya significativos de “Tifón”. 

Según la OMS, estas subvariantes tienen presencia en por lo menos 65 países. A la fecha, ambas comenzaron a tener presencia importante en Europa, Estados Unidos y Asia. En Francia ya representan el 25% de los casos y el 10% de los nuevos contagios en Bélgica. A nivel mundial, se prevé que estas nuevas mutaciones de Ómicron se conviertan en las dominantes a partir de esta temporada invernal que inicia en diciembre. En América Latina ya se registran los primeros casos en países con mucho movilidad internacional como Chile, Brasil y México.  

El reporte de vigilancia genómica nacional al 17 de noviembre, ya registra más de 120 casos de estas nuevas variantes, con mayor presencia en la CDMX y Yucatán, y pocos casos aún en el Estado de México, Nuevo León, Baja California, Querétaro, Campeche, Chiapas y Tabasco. En próximas semanas se esperan incrementos importantes, tal y como ocurre en Europa y Estados Unidos. La buena noticia es que en países como Francia, donde uno de cada cuatro contagios se debe a estas variantes, no se reportan incrementos en hospitalizaciones ni decesos asociadas a “Perro del Infierno” y “Tifón”. 

Posiblemente generarán muchos contagios y reinfecciones, pero las vacunas, nuevamente, evitarán casos graves y muertes. Sin embargo, por precaución y sin llegar a medidas estrictas, debemos seguir usando cubrebocas en lugares cerrados o muy aglomerados, ayudando también a prevenir la influenza en esta temporada, y continuar con el higiene y distanciamiento posible, de esta manera protegeremos a los más vulnerable: personas con vacunación rezagada, adultos mayores y enfermos con comorbilidades crónicas como diabetes, hipertensión y obesidad. ( drulin@datametrika.com , Investigador Titular, UJAT, Director General, Datametrika Co.)